Otro Camino

Capítulo 0

   Capítulo 0:

"Otro Camino"

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   El cervatillo tenía la cabeza agachada entre la maleza, buscando alimentos. Se podía distinguir bien como, entre los árboles y arbustos del bosque, el fino y ágil animal se movía con cuidado.

Una rama rota lo alertó, y alzó la cabeza con cuidado y temor. No tan lejos como deberían, un niño pequeño sostenía un arco, tembloroso.

Tenía rulos cobrizos cubriendo toda su cabeza, haciéndolo ver más pequeño de lo que ya era. Su rostros lleno de pecas estaba marcado con una mueca de desagrado, pero aún así sostenía el arco con fuerza.

-Vamos, Newt, concéntrate.- lo animó su hermano mayor, un alto chico de cabellos castaño rojizos.

Newt respiró hondo, enderezándose ligeramente. Apuntó con dificultad hacia el animal, aún tembloroso y con miedo.

Tensó el hilo, le dio impulso a la flecha. Sabía cómo disparar, le tiraba flechas a los árboles o a puntos marcados desde pequeño, para divertirse y jugar con su hermano. Pero, ¿Dispararle a un animal? ¿A un ser vivo? No estaba listo, no sentía que estaría listo nunca.

Y, por lo mismo, cuando su hermano lo instó a tirar, lo hizo, desviándose. Giró el arco a un árbol cercano y lanzó sin más, produciendo un ruido que fue suficiente para que el ciervo se echara a correr a través de los pastos y los árboles.

Escuchó, detrás suyo, como Teseo suspiraba con decepción, o más bien, resignación. Él se lo esperaba, Newt era un tierno omega, estaba en sus instintos el proteger la vida, no acabarla.

El chico más pequeño respiraba agitado, su pecho tembloroso subiendo y bajando mientras se volteaba y abrazaba a Teseo con fuerza.

-Ya, ya, está bien.- murmuraba el mayor, palmeando su espalda.

Newt se alejó un poco, como recordando que a él no le gustaban los abrazos. Se limpió las lágrimas que querían salir de sus ojos.

-No puedo.- susurró pesadamente.- No puedo dispararle a un ser vivo. ¡Es simplemente injusto!

-Newt, a veces hay que hacer cosas que no nos gustan tanto para vivir. Necesitamos comer, la carne viene de los animales, y hay que conseguirla de alguna manera.- aún intentaba consolarlo, aunque cada vez lo conseguía menos.

-Es que, ¡Es que, ¿Cómo te sentirías tú si alguien llegara a cazarnos?!- la pregunta ahogada sonó como un reproche.

-Ya hay alguien cazándonos, la diferencia es que ellos no lo necesitan para vivir, nosotros sí. Hay que salir adelante luchando, pequeño, a veces no hay más opciones que actuar por la fuerza.

-¡Debe haber otra camino!- replicó el niño, las lágrimas ya bajando por sus mejillas.- Debe haberla, siempre hay otra forma diferente a la fuerza.

Teseo suspiró, revolviendo sus cabellos amigablemente con una mano.

-Confío en que, si es lo que más deseas, lo lograrás. Pero ahora no lo hemos podido encontrar, así que aún hay que recurrir a lo que haya. Iré a cazar, Newt, ¿Volverás a casa o-

-Iré a buscar bayas- murmuró, interrumpiendo a su hermano, secándose las lágrimas y dando una sonrisa feliz. Si no podía ayudar cazando, entonces buscaría otras maneras de apoyar a su familia.- ¡Recuerdo bien dónde había! Nos vemos.

Saludó rápido al mayor, que rió ligeramente por los cambios de humor de su hermano, pero cuyos ojos estaban llenos de nostalgia.

Suspiró tristemente.