A Mi Juventud [wonhye] 🌹🦋

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𝐇𝐢𝐜𝐞 𝐭𝐨𝐝𝐨 𝐥𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐩𝐮𝐝𝐞 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐛𝐨𝐫𝐫𝐚𝐫 𝐞𝐬𝐭𝐞 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐭𝐚𝐧 𝐞𝐠𝐨𝐢𝐬𝐭𝐚, ¿𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐚 𝐦𝐢 𝐡𝐞𝐫𝐦𝐨𝐬𝐚 𝐝𝐞𝐬𝐩𝐞𝐝𝐢𝐝𝐚?

[pLot tWisT: nunca voy a fiestas y ese rollo so no tengo ni idea de lo que se lleva a una fiesta así que literalmente busqué "ropa de fiesta" pero no me gustaba nada así que busqué outfits de Itzy que cuelan y me gustan más. Lo hice lo mejor posible por describirlos, pero si os cuesta imaginarlos o hacerlos bonitos, tenéis la foto abajo. Si no os gusta pues imaginaos algo mejor.]

No había ido a una fiesta desde que conoció a Hyejoo, y aunque solo habían pasado unas semanas, le parecía un recuerdo demasiado lejano. Los pantalones negros anchos seguían siendo igual de cómodos y aunque sabía que la mayoría de personas llevarían ropa más ajustada, ella prefería como le quedaban los pantalones anchos. El top sin mangas que llevaba puesto era de sus favoritos. La tela era negra y formaba un pequeño lazo sobre el pecho, además de que había otro más pequeño hecho con tela blanca justo debajo. Nada era demasiado apretado, podía respirar a la perfección y se sentía guapa, por lo que creyó que estaría relajada al llegar a la casa de Jinsol. Sin embargo, cuanto más se acercaba el bus a la parada, menos segura se sentía, pues la idea de conocer a la dichosa Yerim hacía que su corazón se saltase un latido. Hyunjin, quien se encontraba a su lado en el asiento del bus, notó su nerviosismo y posó una mano sobre la suya, agarrándola después para ponerla encima de su regazo. Chaewon dedicó unos segundos a mirarla. Comprando, habían encontrado unos vaqueros de color azul claro con una tela brillante cubriéndolos, depositando brillitos por todo el pantalón. Hyunjin los había comprado nada más encontrar su talla. En la parte de arriba, llevaba un top de color rosa pastel con blanco en los bordes. Era mucho más pequeño que el de Chaewon y la rubia no podía dejar de pensar en lo insegura que se sentiría vistiéndolo, pensando en lo mal que le quedaría o en si conseguiría llenarlo.

-Chae, podemos volver cuando quieras.- dijo- Lo sabes, ¿verdad?

-No puedo volver, tengo que encontrarlas.- Chaewon mantenía la mirada fija en el suelo. Alguien había dejado pegado un chicle rosa en el suelo y sus ojos habían decidido que descansar mirando la asquerosa masa de goma llena de polvo y suciedad sería más fácil que enfrentar la mirada de Hyunjin, que seguramente sería terriblemente directa y la haría sentir pequeña. No cerraba los ojos y su boca se encontraba medio abierta. Sentía que iba a acabar babándose entera si no cerraba la boca pero no podía evitarlo. Se sentía paralizada.

-¿Chae?¿Chaewon?¿Aeong?- la chica había empezado a llamarla. Chae se sentía muy lejana a su voz bonita. ¿Y si Hyunjin no estaba ahí? ¿Y si era solo una imaginación suya? ¿Y si solo existían Yerim, Hyejoo y ella misma en el mundo? Sus pensamientos habían perdido ya toda la coherencia pero no podía controlarlos. Exacto, todo parecía fuera de control. Sintió una mano en su mandíbula y, segundos más tarde, se encontraba mirando a su amiga, que sujetaba su cabeza con una mano y con la otra acariciaba una de las suyas.- Chae, estoy aquí. ¿Sabes a donde vamos?

-¿A encontrar a Hyejoo?- preguntó. Su voz sonó pequeña. No entendía nada, sentía que el mundo se derrumbaba a su alrededor, y el no estar llorando solo la descolocaba más. ¿Cómo podía sentirse tan mal y no llorar?

-No vamos a encontrar a Hyejoo ahora.- Hyunjin sonreía, intentando calmarla.- Iremos a encontrar a Hyejoo otro día.

-Tú no puedes venir.- dijo. Ni siquiera era consciente de lo que estaba diciendo, pues las palabras solo escapaban de su boca sin pensarlo.- Sólo yo puedo encontrar a Hyejoo.

-Entonces tendrás que encontrarla otro día. ¿Dónde vamos hoy? Intenta pensar la respuesta correcta.

Se calló un segundo, observando a la sonriente chica mientras pensaba.