Dónde estás tú...? (COMPLETA)

Buscando el camino de regreso

El Patriarca había comenzado secretamente, como había prometido, con la búsqueda del traslador que me permitiría regresar a mi tiempo, puesto que no podía quedarme allí mientras haya un ente por ahora desconocido tratando de asesinarme. Había utilizado pequeños grupos de caballeros de plata, siempre liderados por un caballero dorado. Degel se había puesto a la cabeza de la búsqueda, y luego de varias horas y noches leyendo viejos pergaminos, descubrió pistas de dónde se podría encontrar el traslador; las mismas apuntaban a dos ciudades: Volos, en Tesalia, que ya desde este siglo, era considerada como uno de los mayores puertos comerciales de Grecia,y también contaba con un patrimonio arqueológico importante, entre los cuales estaban las ruinas de la ciudad neolítica de Sesklos. Y otra posibilidad era que se encontraba en la ciudad de Larissa, importante centro agrícola, cultural y comercial, habitada desde hace más de doce mil años y dónde, según la leyenda, había nacido Aquiles, héroe de la guerra de Troya, y había muerto Hipócrates, el padre de la medicina. Si bien se desconocía exactamente cuál era el objeto, Sage sospechaba que se trataba de un ánfora o de una copa. Pero debido al avance de la Guerra Santa y del Lienzo Perdido, las misiones de búsqueda debían suspenderse frecuentemente para poder hacer frente a los espectros que amenazaban con atacar el Santuario y los pueblos vecinos. Asimismo, Sage había estado planeando cómo iba a llevar a cabo su más ansiado sueño desde la anterior Guerra Santa: sellar a los dioses gemelos. Al mismo tiempo, continuó investigando sobre la identidad del enemigo encubierto que se encontraba entre nosotros; llegó a la conclusión de que no sólo era un cambia pieles, capaz de adoptar cualquier forma, sino que debía de poseer la habilidad de la clarividencia como para haber atentado contra mi vida de esa manera.
Ya debía de saber toda la verdad, o con suerte, sólo una parte de ella.
El Patriarca estaba muy angustiado debido a esto;  si este espectro conocía todo, entonces sabía que mi conexión con la Guerra Santa no era en este tiempo, sino en el futuro, y seguramente estaba enterado de la existencia de mi hijo, el hijo de Ásmita, destinado a terminar con el conflicto entre Athena y Hades en el siglo XXI. Cuanto más tiempo pasara aquí en este tiempo, corría más riesgo de que el espectro nos encontrara.

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Una tarde, nos encontrábamos Degel y yo en el salón de reuniones del templo Papal revisando libros, pergaminos y manuscritos; leyendo y releyendo, buscando más pistas e indicios que pudieran ayudar a nuestra búsqueda. Mi amigo estaba absorto concentrado en unas líneas borrosas garabateadas en un antiquísimo pergamino; aquello picó mi curiosidad:

_¿Alguna novedad Degel?, pregunté amablemente a lo que Acuario respondió satisfecho:

_Creo que ya sé quién es el espectro que buscamos.... Según este escrito, existe sólo uno de los sirvientes de Hades que tiene la capacidad de cambiar de forma a su antojo y que además posee el don de ver el futuro; se trata de una mujer, Banu, estrella celestial de la Clarividencia. Al parecer, sus visiones llegan a ella en sueños, en forma de flashes, que luego interpreta y de esa manera genera una predicción; de esta forma utiliza su habilidad para servir al dios del Inframundo. Y en cuanto a la capacidad de cambiar de forma, puede tomar la forma humana que desee, siempre y cuando la haya visto antes...Uff, por Athena, si esto es así, podríamos estar en aprietos; esta mujer utiliza sus habilidades para sacar ventaja y adelantarse a los hechos. Es la razón por la cual logró evitar nuestros ataques en el calabozo... _ .

Se quitó sus anteojos, presionó con sus dedos el puente de su nariz mientras cerraba los ojos y daba una inspiración profunda; acto seguido abrió sus ojos nuevamente, y su mirada violeta se posó en la mía, dejando traslucir una mezcla de frustración y temor.

_ Realmente esto es algo complicado; debemos idear una estrategia para poder adelantarnos a ella,antes de que tome la delantera... si logra dar el primer paso y llega hasta ti, con su habilidad, verá todos nuestros ataques antes de que sean lanzados...yo...temo no poder protegerte, Natalie.._ , dijo en voz baja las últimas palabras mientras se acercaba a mí. _No podría soportar si algo te ocurriera...sabes que daría mi vida por ti si fuera necesario. Yo.. te sigo amando, Natalie...no he podido olvidarte, y creo que jamás podré hacerlo..._ , mencionó al mismo tiempo que con una de sus manos acariciaba mi mejilla, para luego elevar mi mentón para obligarme a mirarlo a los ojos. _ Sé que tu pérdida es muy reciente, y que tienes un lazo con Ásmita que los unirá para siempre, pero en estos momentos necesitas a alguien que sea tu apoyo, que los cuide tanto a ti como a tu hijo, y yo estoy dispuesto a correr el riesgo. Por favor, no me rechaces esta vez Natalie_ .