Ociranay

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~🐾~

Ya había pasado un tiempo dando vueltas por aquel lugar, la rutina que tenía antes de conocer a Drau se volvió un vago recuerdo, mis días ahora se concentraban en analizar si existía cambios en el lugar, analizaba la brisa del viento, los movimientos de las delicadas hojas del árbol, observar el cielo, en las últimas noches pasaba un poco más de tiempo en aquel lugar, mis pensamientos siempre se encontraban en el mismo campo, trataba de no descuidar mis deberes en el mundo real, no necesitaba que mi familia o compañeros interfirieran con el tiempo que podría invertirlo en encontrar una salida de Ocinaray, debía simular que todo en mi vida seguía la línea de la ¨normalidad¨, necesitaba encontrar respuestas. Iba y venía del arco de la perdición al árbol de las plumas todos los días, pero no encontraba nada nuevo, ningún cambio; al pasar más tiempo por las noches en el árbol de las plumas, tenía la sensación de estar dentro de una simulación, perfectamente creada, sin alteraciones, sin cambios, antes, podría decir que logre alterar el estado de aquel lugar, pero a estas alturas, ya me consideraba parte de la decoración que algún programador implanto en los pasillos de mi mente.

Pasando 3 semanas enteras de estar en el mismo lugar, no hacía esfuerzo alguno por encontrar algo, los días se convirtieron una revisión de rutina, como para asegurarme de que todo seguía en su lugar, quería resolver los misterios que se encontraba en el arco de la perdición, solo que no encontraba la forma. El jueves de aquella semana paso algo curioso que despertó un vago recuerdo que cambiaría mis días en Ocinaray, por la mañana en clase de matemáticas el maestro comenzó con un discurso de como nacieron las matemáticas, bueno como tal el concepto de matemáticas, no era algo nuevo para mí lo avance en cursos inferiores, pero, dentro de aquella historia dio algunos ejemplos en la pizarra, anotó diversos números, naturales, romanos y por alguna extraña razón también números egipcios, era extraño, pero, apenas dibujo el primer símbolo mi mente presto total atención, pensé que escribiría algún tipo de número raro, al revés o tal vez mezclados pero no, los primeros se asemejaban a la numeración romana, pero conforme fue anotando más, daba la impresión de tomar formas interesantes, como pirámides, espirales y otras formas muy interesantes, algo rustico, básico, pero mi mente no lo dejó pasar, no era especialmente atento con las clases, pero aquella clase si presté mucha atención, incluso podría asegurar que el maestro estaba muy sorprendido por mi actitud de aquella mañana, los números que veía en ese momento formaban parte de los símbolos en el arco pero ¿en el arco serian también números? Quizá estaban involucradas letras egipcias; cuando terminó la clase fui donde el maestro para preguntarle si sabía más sobre los egipcios, inmediatamente simplemente me observo muy detalladamente, como si no creyera que yo le preguntara algo, pero después de analizarme solo preguntó por qué mi repentino interés en su clase, dato curioso, hasta aquel momento no tomaba parte en sus clases, no prestaba atención, ni mostraba interés, quizá ahí el porqué de su actitud hacia mí, mi salida más fácil pero quizá la menos creíble fue decirle que era interesante, no mentía en eso, si me interesaba, solo que él no se imaginaba el porqué, solo se limitó a mirarme confundido una vez más, sabía que no era su área pero respondió mis preguntas, me comentó el gran aporte hicieron al mundo, su origen e importancia, de todo eso obtuve datos muy interesantes que me ayudarían en la investigación.

De vuelta a casa, aquel día no se encontraban mis padres, pero de todas formas me apresure en cumplir con mis tareas, para no tener interrupciones. Termine rápidamente mis cosas y después de comer muy bien entré al otro mundo, cuando desperté, me apresure a bajar del árbol y correr lo más rápido posible al arco, no tenía mucho tiempo para perder, si eran letras o números quizá podría traducirlas, pero ¿podría comprenderlas?, pare de correr y me puse a pensar sobre ese nuevo problema que se me presento, pensé por un breve momento sacudí la cabeza y seguí caminando -algo se me ocurrirá en el camino- pensé.

SkilningurDonde viven las historias. Descúbrelo ahora