A S H E R ✓ [ The Circle.

La disculpa

-¡Despierta!- sentí el algodón de la almohada pegarme en el cuerpo, no me moví, -joder- masculló irritado.

Ya conocía el acento de Seung a pesar de que hablaba muy buen el latino, estaba segura que era él pegándome con la almohada seguramente para despertarme, pero lo que él no sabe es que ya hace 15 minutos lo hice. Pero seguía bastante enojada con él y por el bien de los dos era mejor que ni me levantara hasta que yo quisiera, eso sin contar que siempre estoy de malas en las mañanas.

Después de unos segundos, se escuchó silencio, ¿Se fue? Por fin.

Que bueno porque realmente no tenía ganas de escucharlo. Acomodé mi almohada para dormir mejor, pero al segundo mi sabana fue arrancada de mi cuerpo, -¡Sabía que estabas despierta!

¡Aggg!

Esta vez me senté de golpe en la cama y vi a Seung con la sábana en su mano mostrándome la.

¿Que le surge a él y su manía de levantarme así?

-¿No me puedes dejar en paz, coño? ¡Es la segunda vez que entras a mi cuarto despertando me de la mierda! ¿Qué pasa contigo?- frustrada le aventé una almohada.

-¿Qué me pasa?- repitió esquivando la, -¿Quieres saber lo que me pasa? Que no has salido de este puto cuarto desde ayer en la mañana, exactamente desde que nos peleamos, joder ayer ni si quiera fuiste a tu primera clase.

Dí una carcajada, -Como si me importará ir a esa asquerosa clase, ¿Pero sabes lo que en verdad me da risa? Que creas que estoy así por ti- mentí mientras volví a acostarme.

-Bien- y luego otra vez silencio, por favor que está vez si se haya ido de verdad. Brazos firmes me agarraron de la cintura levantándome con fuerza. ¿Que mierda?

-Entonces, si no me lo dices te llevaré a clases, así como estás- Seung me puso en sus hombros y camino hasta la puerta.

-No eres capaz- le desafíe confiada.

-¿Ah sí? Averígualo- con su mano libre tomo el pomo de la puerta y la abrió. Cierto ¿Como había entrado? Y recordé que en mi casa nunca cerraba mi habitación, ¿para qué hacerlo?. Pero tenía que quitarme esa manía, no puedo estar confiada corriendo el riesgo de que Seung entre cuando le dé la gana o cualquier otra persona.

Salimos hasta el pasillo aún conmigo en sus hombros como si estuviera cargando una pluma. Seung iba a cerrar la puerta y solo lo veía incrédula. La puerta de la habitación de al lado se abrió y los dos miramos al mismo tiempo.

Asher apareció en nuestro campo de vista. Estaba saliendo tranquilamente de su cuarto, pero cuando empezó a caminar levantó su cabeza y sus ojos cruzaron los mios, una sonrisa ladina surgió. No puede ser. ¿Cuál era la posibilidad de que saliera en este preciso momento? Habiendo tantos.

Abrió su boca para decir seguramente un comentario estúpido sobre mi aspecto mañanero, pero la cerró y su expresión se enfrió al ver a quién me llevaba en los hombros. ¿Seung?

Seung se dio media vuelta y mi trasero quedó frente a Asher. Genial, creo que no podía ser más incómodo.

Volteé tratando de ver a Seung y por lo visto también tenía una mirada retante, wow y yo pensando que ya había conocido lo peor de Seung cuando seguramente no voy ni por la mitad. Que bueno que Asher se lo estaba comiendo vivo con la mirada para que no se fijara en mí. Aunque, en este momento se podía ver lo peor de los dos, ninguno se salvaba. ¿Por qué se les veía tanto odio?

Dejé de apoyar mis brazos en el hombro de Seung, y los dejé caer en su espalda, las yemas de mis dedos tocaron accidentalmente su trasero. Ops. No dijo nada, parece que estaba muy concentrado en una competencia de miradas con Asher.