5

660 40 28
                                    

Natasha no pasó por su casa. Se fue directo a la reunión del equipo. Y mientras ella se servía un café y galletas cuando llegó, en casa James limpiaba la herida que tenía en la cara. Tendría que justificarla de alguna manera si alguien le preguntaba, después de todo se suponía que sólo iría a observar, no habrían enfrentamientos.

Salió del baño y se cambió de ropa. Al mirar dentro de su habitación buscó con la mirada cámaras y micrófonos. Sabía que estaban allí y sintió náuseas. Nada entre Natasha y él había sido privado. Una profunda rabia se apoderó de él. Tenía la mente hecha un desastre. Tanta información que debía procesar. Y como si fuera poco, la imagen de Natasha junto a Murdock se le vino a la cabeza. Cerró los ojos e intentó olvidarla. No sabía qué hacer, con quién hablar. Si decirle a ella y buscar juntos una salida. Y pronto recordó que cada segundo estaban siendo observados y a la menor señal de traición la dejarían con un daño permanente.
Intentó calmarse. Tomó su chaqueta y salió de la casa a la reunión con el equipo.
Era hora de comenzar.

~°~

Cuando entró al complejo, saludó a la recepcionista como siempre. Pero esta vez incluyó un guiño y una sonrisa. Ella se sonrojó y le sonrió de vuelta.
En el elevador revisó su teléfono. Natasha le había escrito que se verían allí, que no la esperara en casa. Cuando se abrió la puerta vio a Sam y Wanda. Natasha no estaba.

- Al fin llegas - dijo Sam casi sin prestarle atención.

- Y Natalia?

- Fue al baño - dijo Wanda y justo en ese momento ella apareció.

- Hola.

- Hola.

- Estás bien? - preguntó al ver la herida en su rostro.

- Si. No es nada. Sólo un idiota que atravesó su auto frente al mío y no le gustó lo que le dije - habló los suficientemente alto para asegurarse que todos lo escucharan y no tener que explicar más el asunto.

- Bueno. Qué es lo que logramos averiguar? - preguntó Sam y todos se concentraron en el trabajo.

James cada cierto tiempo miraba a Natasha, preguntándose por qué demonios ya no traía el lápiz labial y si Murdock había tenido algo que ver en eso.
Natasha por su parte estaba cansada. Necesitaba darse un baño y dormir. La mirada de James la tenía distraída. Se veía preocupado pero por lo que había dicho no había conseguido nada nuevo en China Town.

- Barnes!!! - Sam levantó la voz porque no lo había escuchado. Estaba perdido en sus pensamientos.

- Lo siento. Que?

- Ve a recursos humanos y pídele a Marianne los archivos de estas personas.

- De acuerdo - recibió el post it que le dio Sam.

- Nat, llévale esto a Rick para que lo ingrese - le extendió una carpeta.

Los dos subieron al elevador. Su pequeño espacio de comunicación personal cuando estaban en el trabajo. Ahí nadie los veía y escuchaba. Al menos así creía él que era, hasta que la venda había caído de sus ojos.
Natasha llevó una mano al rostro de James, justo donde estaba la herida.

- Te duele?

- Un poco.

Ella se acercó y lo besó. Él tardó un microsegundo en reaccionar. Estuvo a punto de responer el beso de inmediato, como realmente quería, pero la actuación había comenzado.
Se quedó quieto a propósito y luego le respondió. Habitualmente ese beso se convertiría en un montón de caricias candentes en el elevador, pero esta vez sólo fue un beso y la abrazó con menos fuerza de la habitual. Ella pareció no notarlo. Y esa era precisamente la idea.

Instinto 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora