Mi huerto de Ideas

.Una carta de odio.

No se que escribir, tengo ganas de escribir, pero no logro plasmar todas esas facetas en una sola estrofa.
En general son pensamientos de todo, mi paciencia no la tiene cualquiera y cualquiera que la tenga, porfavor que la devuelva.

Odio cuando doy todo y no recibo nada a cambio, nunca podes esperar algo de alguien, pero se supone que alguien que me quiere debe dar algo a cambio por mi.

Odio no poder expresarme sin tener que ser mi mismo catador de palabras, hoy en dia, cualquier excusa es valida para olvidar a alguien.

Odio como estoy escribiendo en este momento, no tengo coherencia ni cohesión, no es fácil, quiza no sea un poema, pero si una carta de odio al lector, despues de todo, esta bomba de relojería dejó su paciencia por cada tic del reloj.

Odio tener que sobrepensarlo todo, mi cabeza se vuelve más ágil cuando no debo pensar en eso, que cuando debería pensar de enserio, es mas facil enrollarse en un mismo que desarrollar un problema matemático, al fin y al cabo, no encuentro la respuesta a ninguno.

Odio pensar que esto deberia ser un poema, pero no le llega ni a la suela.

Odio que me ignores cuando mas lo necesito, desde tus poca empatía en respuestas, hasta de tus excusas cuando me digno a hablarte, al final, antes que un hola, primero va tu excusa.

Odio no poder decirte la verdad cuando estoy mal, nunca hubo ningún problema que me haga tan mal como yo mismo.

Odio proponerme cosas las cuales nunca termino, podría decir eso, si almenos dejara de pensarlas pará almenos, comenzarlas.
Obviamente, para despues quejarme.

Me recuerda, odio que me digan que soy un quejón e inconformista, si tan solo supieras lo que es tener un sentido de la crítica.

Odio tener poca paciencia, si de algo estoy seguro es que secretamente me enoja que no me devuelvas el mismo tiempo que te deposite, después de todo, pude haberlo gastado en mejores cosas.

Sin embargo, no odio todo, quiza estes leyendo y sientas que todo lo escrito va para quien lo lee, porque seguramente, sentiste que hiciste todo lo anterior mencionado.

No te odio, pero no se puede apagar un volcán con un vaso de agua, y mucho menos, mi temperamento con una charla.

Odio tener que haber escrito esto, pero si no lo hacía, nadie lo iba a hacer.

Odiaria tener que hacerlo denuevo, pero mas odiaria, que vuelvas a cometer otra ves, el mismo error.