¿Una vida tranquila?

Capítulo 4 "Cinco Meses" (1/2)

Para suerte y alivio de algunos, en especial de Jaken, los cambios de humor de Rin desaparecieron poco a poco, al igual que sus mareos y vómitos.

Después de que la castaña termine de comer, planean ir a la aldea de Kaede, claro que esa idea fue de Rin, ante lo cual estuvo protestando Jaken.

En la entrada principal del palacio, Jaken junto a Ah-Un esperan a Sesshomaru y a Rin.

-Rin: Sesshomaru... —se detuvó de golpe.

-Sesshomaru: ¿Qué sucede? —al voltear vio la sonrisa y un brillo en los ojos de la castaña, quien inmediatamente sostuvo su mano.

-Rin: Siento como patea —respondió emocionada, colocando la mano del mayor en su abultado vientre. No era la primera vez que sucedía, pero no puede evitar sentir emoción cada que sucede.

La sonrisa de Rin se hizo más grande al ver una sonrisa de lado en el rostro del peli-plata.

-Rin: Ya quiero que nazca —espetó con entusiasmo, para luego abrazarlo.

Cuando llegaron a la entrada, Sesshomaru sostuvo por la cintura a Rin para ayudarla a subir en Ah-Un, una vez arriba, ella acarició ambas cabezas.

El viaje a la aldea pasó con tranquilidad, en lo que a ellos concierne, Jaken y Rin "peleando", bromeando, a veces él regañandola. Todo muy normal entre ellos cada que salen, aunque a decir verdad, en cualquier lugar.

A pesar de que sea algo muy común, Jaken agradece internamente que estén volando en Ah-Un; él y Rin, porque de lo contrario cree muy probable que desde antes el peli-plata le hubiera arrojado una piedra, aunque no cantaría victoria, no, por supuesto que no, no hasta que lleguen a la aldea o que regresen al palacio y que Sesshomaru no le haya aventado algo, hasta ese momento se sentiría aliviado y agradecido, pero siendo sincero, ya está más que acostumbrado a todo eso, después de todo, sabe que al igual que con Rin, si él algún día está en grave peligro lo ayudará.

Descendieron exactamente a un lado de la cabaña de Kaede, de donde salía ella con Inuyasha y Kagome, es claro que sintieron sus presencias.

Se llevaron una gran sorpresa al ver a Kagome con su vientre abultado, y ella con los demás por igual se sorprendieron al ver de la misma manera a Rin.

A diferencia de todas las veces anteriores y a comparación de Jaken, Sesshomaru por primera vez tuvo que entrar a la cabaña de Kaede. Es verdad que por Rin a tenido cierta y muy pequeña convivencia con Kaede, Inuyasha, Kagome, Kohaku, Shippo, Sango, Miroku y los hijos de los últimos, los cuales por alguna extraña razón siempre se acercan cada que lo ven, ahora con menor frecuencia que cuando eran más pequeños y debido a eso, Inuyasha siempre lo molesta con varios comentarios al respecto, sin embargo, el que tenga una regular convivencia con ellos, no significa que disfrute de su compañía, si fuera por él no los volvería a ver, pero no haría eso por Rin, tampoco dejaría que fuera sola y ahora mucho menos en su estado.

En el pasado nunca se imagino que sería de esta forma su vida, aunque realmente no la cambiaría, en realidad no se queja.

Por la tarde, todos fueron al río más cercano se la aldea para disfrutar del clima agradable y ahí mismo comerían juntos.

-Shippo: En verdad a sido una agradable sorpresa ver que tú también estás embarazada, Rin —sonríe estando sentado junto a las 2— hasta en eso se han puesto a competir Sesshomaru y el tonto de Inuyasha.

-Kagome/Rin: ¡Shippo! —se sonrojaron.

El mencionado luego de decir eso soltó una carcajada en compañía de Miroku, aunque al sentir la mirada de 2 hombres en particular guardó silencio mientras un escalofrío lo recorre.