Alejate Agreste [Lukanette]

¿Mandarás todo al carajo?

Regresaba a casa, no podía siquiera dejar de pensar en todo lo que había querido decirle a Adrien, el chico que robó mi corazón aquella tarde lluviosa de la preparatoria, aún tenía el paraguas, junto con todas las cosas que él alguna vez me dió, ¿un tormento o un recuerdo? Sentía mis ojos picar, si que había recuerdos lindo con el, mi teléfono comenzó a sonar, miré la pantalla, el nombre de "mi rubio engreído" marcaba la parte superior de mi teléfono, ¿Contestar o no hacerlo? Decidía mentalmente, ¿Dañarme o ignorarle?

— Maldita sea Adrien, si vuelves a llamarme, juro que no podré controlarme y contestaré — susurré para mí misma, el teléfono dejó de sonar, no demoró mucho cuando sonó nuevamente, contesté, no pude evitarlo.

— ¡Marinette! ¡Por fin contestas!

— Habla rápido Agreste, no estoy de humor y voy manejando — Luchaba por no llorar en ese momento, me sentía completamente incompleta, triste, sin ganas de siquiera hablar con alguien, mucho menos con él.

— Primordialmente, quiero hablar como las personas civilizadas.

— Claro, ¿Por qué no invitas a Lila a la conversación?

— Vamos Mari, no puedo estar sin ti, dame la oportunidad de explicarte, por favor — rogó.

— Claro, ¿Quién sigue en tu lista? ¿Chloe Burgeois? ¿Amanda Listen?

— Nunca tuve nada con ellas...

— Ahh, ¿Y con Lila si?

— No... No me refiero a eso.

— ¿Entonces a qué te refieres?

— Lila solamente fue para pasar el rato.

— Más tarde dirás qué yo soy solo una amiga entonces — Mi teléfono comenzó a vibrar, ¿Una videollamada? No es la mejor idea Agreste — Voy manejando, no puedo contestarla.

— Pero si hacíamos eso antes, cuando tú ibas a tu empresa y yo... A Gabriel's.

— ¿Lo dudaste?

— Pff... Para nada Marinette, seguramente la señal de tu teléfono está fallando.

— Estoy segura que la señal está bien Adrien. Olvídalo, no se por qué acepte hablar contigo — sin decir ni una palabra más, colgué la llamada, ¿Cuánto tiempo me estuvo viendo la cara de estúpida?

Nuevamente, su foto iluminó la pantalla, está será la última vez, contesté la llamada.

— ¿Mandarás todo al carajo?

— ¿No lo hiciste tú primero? — y colgué, para no volver a tocar este tema con mi ahora ex, Adrien Agreste.

— Marinette, ¿Cómo te sientes? ¿Estas bien?

Brinqué, por un momento había olvidado que Tikki se encontraba en mi bolso, sonreí de lado.

— No Tikki, no estoy bien, me siento terriblemente mal...

— Sabes que cuentas con discreción, si quieres platicar conmigo, mis labios están totalmente sellados.

— Pensé, que por una ocasión, estaría todo bien Tikki, pero no fue así, de nuevo Lila se metió en mi vida, creí que ya habíamos dejado de lado todo eso, supongo que las palabras de las mentirosas siempre serán eso, mentiras.

— En cierto modo, ya lo esperaba Marinette, se me hacía totalmente extraño que Adrien durara tanto en sus "reuniones con ejecutivos"... Pero me parecía imprudente mencionarlo, discúlpame...

— Tú no has hecho nada malo, no te disculpes, supongo que en algún momento tuve que pensar en eso...

Tikki volvió a esconderse en mi bolso, puesto que estábamos por entrar al centro, donde miles de personas pasaban diariamente, pasaba por la calle Klepher Steen, una de las nuevas panaderías de mis padres estaba justamente en la esquina, iba a llegar por unos croissant, tenía planeado patrullar con Chat por la noche y la última vez le prometí algunos.