CAPÍTULO ESPECIAL

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Capítulo Especial

Nota: Se sitúa antes y después de la línea de tiempo de la historia

Someday
AppleDash

A pesar de todo el tiempo transcurrido y por más que había deseado sacar esa imagen de su cabeza la perseguía en todos lados, el rostro tan dulce de aquella rubia y sus finas hebras doradas que parecían el sol.

Sin duda alguna estaba encantada, el aura de aquella chica la enloquecía aunque sabía que no podía llegar a nada con ella, a pesar de la preciosa sonrisa que está le había regalado una vez que se habían encontrado.

Definitivamente recordaba con claridad el día en que sus almas se habían cruzado. Nunca lo olvidaría.

Había decidido ir con aquella vieja mujer, amaba la sidra de manzana que ella preparaba y su familia vendía, normalmente hacía una parada rápida compraba una gran porción de aquel líquido y se iba, pero esta vez se había retrasado, la abuela le había dicho que aguardara un poco, al ser una clienta frecuente le quería obsequiar otro pequeño porcentaje de aquella sidra, y por supuesto, al ser su favorita, había decidido esperar con una sonrisa.

Aunque, al parecer eso implicaría un retraso en el instituto, y muy probablemente, un buen regaño por parte de Spitfire por llegar tarde a sus clases, pero todo eso se recompensaba con el delicioso obsequio.

Estaba impaciente, sentía que llevaba milenios esperando a pesar de que solo eran un par de minutos.

Suspiro he inicio a patear una pequeña piedra, decidida a admirar el entorno, sin lugar a dudas era fantástico, tan cálido y lleno de naturaleza, amaba los árboles de manzano que llenaban Sweet Apple Acress, podía ver cómo detrás de aquella gran construcción habían
campos de cosecha.

-Vivir aquí debe ser 20% más genial -Decia con emoción.

Camino un par de metros alejándose de la entrada, se acercó y se decidió a observar a un montón de puercos que se encontraban a través de una vieja reja de madera, parecían divertidos en el lodo, Rainbow saco la lengua, definitivamente eso era asqueroso.

Se alejo he inicio a caminar alrededor de aquel gran lugar, se había enamorado de los árboles, de aquel brilloso césped que creaba un perfecto contraste con el rojo de las manzanas.

El sonido de unos pasos detrás de ella la saco de sus pensamientos.

¡Por fin!

Pensó, y se dispuso a girarse para tomar la sidra he irse.

Al girarse por completo observó a aquella majestuosa rubia, quien la observaba con una sonrisa, su cabello bellamente tejido en una hermosa trenza, sus ojos verdes que parecían tan dulces y miraban a través del alma, un sonrojo apareció en sus mejillas y a pesar de abrir la boca no podía pronunciar palabra.

-La abuela me dijo que lamenta haberte hecho esperar tanto -Su voz la atrapó -Pero ya que estamos en las mismas clases, supongo que no te importa si te llevamos.

Rainbow estaba estática, simplemente observándola, era una diosa, parecía un sueño, tal vez una manzana había caído de aquel manzano golpeándole la cabeza y la había enviando con ese ángel.

La vaquera la había observado con detenimiento, ¿Qué si la conocía?, Definitivamente, después de todo sería estupido no conocer a la recientemente nombrada capitana del equipo de fútbol de Canterlot High, su cabello arcoiris era inigualable, y recientemente había corrido el rumor de que está era homosexual, ¿Qué si le molestaba? No, por supuesto que no, ella misma se consideraba bisexual, y no podía evitar que aquella figura bien trabajada la atrapará, de forma inconsciente observó a Dash de pies a cabeza, su mirada recorrió con lentitud cada rincón del cuerpo de la de piel azul, encantadora.

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