no le temas a la oscuridad - Stony

El arte

Era martes, ese día le tocaba a Tony ir a clases de arte.

Hydra muy interesado se volvió a ofrecer para llevar a Tony a sus clases.

Jarvis aceptó, de todas formas, tenía demasiado qué hacer en la mansión. Se acercaba el cumpleaños de Howard, y como siempre, Jarvis debía tener toda la recepción y agenda ya lista para que solo lo revisara.

Hydra esperó a que Tony saliera del colegio.
Apenas escuchó el timbre el niño ya estaba saliendo, corrió hasta Steve y de un salto se aferró lo más que pudo al rubio, éste lo subió hasta su pecho.

- ¿Qué tal, campeón?

- El profesor Yinsen me dejó salir primero porque acabé rápido los ejercicios que planteó – dijo orgulloso

- Magnífico, tengo un niño genio en mis brazos.

Tony se abrazó a Steve y con una amena charla fueron hasta el instituto donde Tony practicaba técnicas en dibujo y pintura.

Steve entró emocionado, pero se extrañó al ver solo un padre ahí.
Todos los alumnos eran adolescentes y Tony era el único niño, vio al castañito subir una pequeña banca, y volteándose le sonrió.

El profesor entró en el salón.

- Ésta tarde comenzaremos un nuevo género de la pintura llamado bodegón o naturaleza muerta. Tomen el lápiz carboncillo 5B comenzaremos con un degradé…

Hydra veía como los estudiantes ya trazaban las divisiones de la cartulina en la que trabajaban, se enfocó en Tony y su concentración en el trazado que realizaba, al terminar tomó el carboncillo y su ceño se arrugó en nuestra de concentración.

El rubio sonreía internamente al ver a su niño tan dedicado en hacer bien el degradé.

Cuando terminó bajó del banquito y corrió hasta Steve.

- ¿Cuál es tu color favorito?
- El rojo
- Stark – llamó la atención el profesor
- Lo siento, ya voy.

El niño volvió rápido a su lugar.

- Bien, la mayoría ya acabó. Tomen un color de su preferencia y realicen la misma técnica. Mismo tamaño de recuadro.

Anthony volteó a ver a Steve con una pequeña sonrisa. El niño volvió a su trabajo totalmente concentrado.

La clase terminó y el castaño corrió hasta el rubio con la cartulina en una mano

- ¡Steve, mira es como el color de tus ojos!

El rubio tapó su boca para que no dijera nada más, cargando a Tony salió del salón.

- Tony, no es común que una persona tenga las pupilas rojas y no debes decirle a todo el mundo el color de mis ojos ni quién soy.

- Okey… - el pequeño apretó sus labios

- Pero me gustó mucho tu trabajo, yo antes pintaba y créeme, eres muy bueno.

Anthony sonrió y animado fueron a su siguiente clase, éste era de ballet.

Cuando Jarvis le dijo a Steve que Tony practicaba ballet creyó que se burlaba de él, pero supo que no era mentira cuando le entregó las direcciones de todos los institutos y ahí estaba la dirección de aquella academia de ballet.

Cuando entró en la infraestructura muchas señoras se le quedaron mirando

~ otra vez… ~ se dijo Hydra fastidiado

Tony lanzó un pequeño gruñido mientras se aferraba a Steve un poco más.

- Ni se te ocurra hacer una escenita de celos, niño.