¤~toxic~¤

capítulo 22

camina lejos de él 

Han pasado nueve meses desde mi "incidente" o eso es lo que decía todo el pueblo ya  que nadie dijo nada más porque mantuvimos todo en secreto, aunque nadie dijo nada las cosas cambiaron desde el día que salí del hospital.

Penélope Bates me obligo a quedarme con ella ya que no podía cuidar de mi misma alejándome de mi  hermano y de mi tía Helen quienes tenían prohibido visitarme ya que eran "mala influencia" para mi bienestar.

Rick Henderson seguía bebiendo en cada ocasión que podía me repetía lo impura que era cada vez que no le hacía caso, logró que me pudiera someter ante él.

Calum Bates se fue de la ciudad al saber que no me podía ver aunque lo intentaba la última vez lo arrestaron, desde ese día Penelope hizo un trato con él para que se alejará

Helen Bates me visitaba una vez por mes por tan solo unos minutos ya que Rick no la toleraba para nada solo por ser hermana de mi padre, ella intentaba sacarme de ahí pero no se podía.

Noah Schnapp se volvió más frío conmigo sin embargo era mi único y mejor amigo, su vida con su familia empeoró, sus notas bajaron, nadie sabía el porqué pero dudo que alguien se lo haya preguntado.

Harley Johnson se volvió más popular por todas las personas que lo odiaban, todo el pueblo sabía lo irritante que lograba ser lo más pero nadie decía nada porque a nadie le importaba, por lo general se encontraba sola en los receso o en cualquier lugar, dado que el trato con mi hermano se llevó a cabo ella me buscaba para preguntar por él pero mi respuesta siempre era la misma "no lo sé".

Jaeden Martell se volvió más agresivo conmigo, todos en el pueblo me decían que el me engañaba y andaba por malos pasos pero siempre sabía que era verdad pero lo negaba para que él no se enojara y no se alejara de mi porque sin él mi única tranquilidad se iba mi única oportunidad de volver a la normalidad.

Por último y la más importante yo, Leanne Bates me había convertido en una persona completamente diferente en una persona que dependía de Jaeden Martell que no importaba que me pegará si no que él no se alejara de mí porque él me volvía normal cada vez que lo hacíamos volvíamos a la normalidad pero justamente en este momento me encontraba en problemas justamente por ese problema ya que aparte de que hacíamos el amor lo hacíamos sin protección.

—tengo miedo—dije a mi tía sosteniendo la caja de la prueba de embarazo

—¿hace cuánto no te baja?—preguntó con curiosidad viendo de reojo la prueba 

—hace más de tres meses—dije con la voz aterrada—no se que hacer, Jaeden está mal  y yo no estoy estable como para cuidar de alguien más—empecé a sollozar

—cariño—me abrazo—no sabemos todavía —acarició mi cabello y una que otra vez besaba—debemos apurarnos antes de que Rick se entere—destapó la prueba e hicimos los procedimientos que indican las instrucciones  

—solo faltan varios segundos—dije viendo el temporizador de mi celular —Helen que hago si sale positivo ¿crees que debo decirle?—dije al borde del llanto que ultimamente hace mucho 

—ya está—dijo al ver que mi celular empezó vibrar, el tiempo se había acabado el resultado ya estaba listo 

—¿puedes verlo tu?—Jaeden atravesó la puerta del baño en mal estado se veía terrible aun más de la costumbre 

—Lea tenemos que irnos de aquí—me agarro del brazo e intentó sacarme del baño a la fuerza haciéndome gemir del dolor que sentía, el mareo se hizo presente 

—Jaeden—dije empezando a llenar mis ojos de lágrimas por el mal humor 

Tome a Jaeden de la mano intentando zafarme de él pero no fue posible su agarre se volvió más fuerte y si en ese momento me di cuenta que no tenía nada que perder si me iba, deje que me sacara de ahí aunque escuchaba los gritos de mi tía detrás de mí no tenía que perder y creo que ese era mi lema ahora ya no tenía nada que perder

—Jaeden—dije tomando su brazo—¿a dónde vamos?—me senté abrochando intente abrocharlo mi cinturón de seguridad pero no tuve tiempo ya que arrancó con gran velocidad

—Lea creo que esta vez si estoy en problemas—paro en un semáforo y colocó sus manos y cabeza en el volante se veía realmente preocupado—tengo miedo que te pase algo—me miró y sus ojos estaban llenándose de lágrimas 

—tengo que decirte algo—me acomode en mi asiento para poder acercarme a él —c-creo q-que e-estoy e-embrazada—tartamude por el miedo a su reacción  

—¿qué?—dijo enojado—¿cómo?—dijo confundido viendome—¿y estas embarazada?....

Un auto detrás de nosotros nos chocó levemente y empezó a sonar el claxon cada vez más insistente hasta que se puso a lado de nosotros, era un auto negro con ventanas polarizadas, bajo la ventana sacando un arma que nos apunto o más bien me apunto a mi.

Por reflejo Jaeden arranco el auto y aunque ya habíamos pasado el peligro vi como una camioneta de color rojo nos golpeaba regresandome a la edad de doce años en donde viví el accidente de mi padre justamente la misma calle a veces cuando dormía soñaba el accidente la pesadilla que me atormento por mucho tiempo había vuelto.

—Jaeden—llamé con miedo cuando lo ví inconsciente—Jaeden—lo moví pero una voz a lo lejos me detuvo

—sal de ahí—oí a mi padre—camina lejos de él—intente buscarlo—el ya esta bien la única que corre peligro eres tu—no sabia lo que decía 

—Jaeden ¿está a salvo?—el me miró e hizo un gesto—no por favor no quiero seguir sin él—solloce

—cariño tienes que dejarlo o si no te arrastrará con él—me moví hacia él

—si nos vamos—tome la mano de Jaeden—nos vamos juntos—comencé a perder mi conocimiento incluso pude ver a un sujeto llamándome a lo lejos

—uno de los dos esta está muriendo—ese fue el último sonido que escuche cuando di mi último suspiró y desde ahí me di cuenta que  en el accidente de mi padre yo no debí vivir debí morir al igual que él, siempre fue mi destino morir, y en este momento mi única esperanza para vivir estaba a punto de morir al igual que yo.