así como en el infierno

capítulo 16

-kagura ya te dije que no quiero nada contigo. Ayumi está embarazada y me hare cargo del niño-

-pero yo te amo naraku, dijiste que estaríamos siempre juntos, que solo había sido un error el estar con mi hermana, no me hagas esto, de verdad yo prometo olvidar todo, solo no me dejes por favor –

-deja de humillarte kagura. ayumi tiene todo y tu solo eres una piltrafa no vales como mujer, eres horrenda despreciable. ayumi es noble, hermosa es mucho mejor que tu y aun que no te guste me quedare con ella y no te atrevas a interferir por que de verdad me conocerás; así que aléjate de nosotros ¿entiendes? –

Esa terrible noche kagura se marchó destrozada, su único amor la había abandonado, tratandola como basura, su propia hermana la había traicionado arrebatándole lo único que le importaba ¿Por qué la vida era tan injusta?

Después de unos meses, se enteró que estaba embarazada, busco a naraku para decirle, pero este no estaba. así que quedo frente a frente con su hermana 

-¿Por qué ayumi? ¿Por qué me lo quitaste? Sabías que yo lo amaba –

-¿y que?  Sabes que nunca me ha importado lo que sientes kagura, deja de ser tan crédula, si yo me quede con el, no es por que lo ame simplemente sabia que tu sentías algo por el, pero sabes, tu no mereces tener un amor; por que eres solo un despojo humano, ¡mira! hundida en la miseria, mientras yo tengo  todo lo que siempre deseaste –

-estoy embarazada-

-y a mí que me importa –

-ayumi, es de naraku-

-pues aun así no lo tendrás –

-¿Por qué eres así ayumi? Tu no lo amas. yo daría mi vida por el-

-lárgate, no quiero que regreses jamás, el es mío ahora y a tu bastardo vele buscando un nuevo padre, por que a mi hombre no te lo daré-

Cerro la puerta en su cara. ayumi tenía siete meses de embarazo ya sabían que sería niña y aun que no les pareció la idea, no se podía hacer nada; naraku amaba a esa mujer, lamentablemente ella no

-naraku viniste-

-ayumi, me dijo del embarazo-

-si, pasa debemos hablar –

Naraku paso de largo quedando justo en medio de aquella sala 

-se que es difícil, pero yo estoy dispuesta a tenerlo y tu puedes venir a verlo cuando gustes, estoy segura de que será niño, siempre lo has deseado ¿no?  –

Naraku la miraba desinteresadamente, se acercó poco a poco hasta quedar uno frente al otro, la tomo por la barbilla depositando un beso: kagura sintió tocar las estrellas amaba a ese hombre por sobre ella misma, sin esperarlo este soltó un puño justo es su vientre, kagura se dobló del dolor, la tomo por el cabello golpeando su cara contra el suelo, la sangre comenzó a surgir empapando esa loseta blanca; tiñéndola de rojo, naraku sin piedad pateo su estómago una y otra vez, repitiéndole que el no quería ese bastardo, que ella era la peor mierda de la tierra y que la unica mujer que amaba se llamaba ayumi, kagura sintió como algo escurría de entre sus piernas supo de inmediato que estaba perdiendo a aquel bebé, que su única alegría se esfumaba en esos momentos, que  la felicidad se la arrebataba nadie menos que la única persona que amaba, quedo en un charco de sangre gimiendo de dolor, naraku la contemplo de pie 

-tsk lamentablemente ayumi no me permitió matarte, quiere que permanezcas con vida y sufras la perdida de tu bastardo ¡demonios esa mujer es perfecta! –

Salió del lugar dejando a un despojo humano, en aquel piso frio bañada en su propia sangre. 

Kagura se marchó de la ciudad, estaba dolida, pero eso era necesario. comenzar de cero, estuvo en Yokohama por más de dos años; regreso por venganza y no se marcharía sin haberla llevado a cabo. al llegar a adachi observo a su hermana ir de compras llevaba a una niña de dos años