VEN A MI

Capitulo 12

Se que lo retrase muchísimo, gracias por la espera, pero quería que durara para siempre, pero este es el final de esta historia, por mas que quise extenderla no quería agregar drama innecesario, creo que ya merecían ser felices al fin. 

Muchas gracias por leer, espero nos leamos en otra historia. 

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Despertaron abrazados, mientras se sonreían cómplices recordando la escena del día anterior, su hermana los encontró besándose y termino por regañarlos por crear todo ese escandalo en su boda, para al final decirles que los perdonaría solo si le daban un buen regalo, cosa que después prometieron rápidamente, pero sería un regalo doble, ya que en la fiesta de su boda Víctor se llevó la atención opacando a la novia, pues no siempre tenían la oportunidad de estar frente a un patinador reconocido medallista de oro.

- ¿ya te dije que te quiero? - le dijo Víctor aun recostado mirando a los ojos a Otabek que le sonrió

-me lo acabas de decir- respondió acercándose para darle un beso en la frente- te amo

-eres injusto- dijo Víctor- yo aun...

-lo sé, no necesito que me lo devuelvas, con que este en tu corazón es más que suficiente

Víctor se sonrojo ante las palabras cursis, pero internamente quería gritar y brincar de emoción, amaba esos detalles cursis

-creo que debemos bajar, aun no se si tu familia vea mal que me haya quedado a dormir

-no lo creo, después de todo estamos casados

-pero ellos saben lo que me paso, ¿aun así?

-aun así, ellos están felices si nosotros somos felices

-Otabek- dijo Víctor acurrucándose mas cerca del peligro abrazándolo- ¿Cuál es el siguiente paso? Se que te pedí que fueras mi novio, pero no se que se hace en estos momentos

-mmm- dijo pensativo Otabek- creo que deberíamos hacer lo que nos diga nuestro corazón, ¿Qué te dice tu corazón?

Víctor se quedó pensativo mirando a Otabek, acariciando con su mano el pecho fornido del pelinegro, notando la piel morena

-mi corazón no sé- respondió Víctor- pero mi cuerpo dice que te desea, y mi mente me dice que te haga mío

-jajajaja ¿hacerme tuyo?, hazme tuyo entonces- respondió con un suave beso en los labios de Víctor, empezando a dejarse llevar de a poco, mientras el calor los recorría

Se empezaron a recorrer con sus manos, sintiendo la piel caliente, reconociendo las formas de sus cuerpos que ya conocían de memoria pero que les gustaba explorar como si fuera la primera vez, con una dedicación y pasión infinita propia de dos personas que se amaban profundamente

-espera- dijo de repente Víctor- no podemos, perdón

- ¿no te gusta? -pregunto preocupado Otabek

-me gusta, me gusta mucho y no sabes cuanto te deseo, pero es la casa de tus padres no creo que sea correcto

-no les importaría- respondió Otabek- pero creo que te hare caso, no quiero que nadie escuche tu voz, eso solo es mi placer- dijo volviendo a besar a Víctor- bajemos a desayunar entonces, y decidimos que hacer ahora, planeaba quedarme unos días más, pero no se si puedas quedarte o...

-me quedare, quisiera que regresáramos a casa juntos

- ¿a casa?

- ¿no quieres? - dijo Víctor en un puchero- ¿o es demasiado rápido?