Aeryn salió de la cocina complemente furiosa, con JungKook detrás pisándole los talones.- Aeryn, amor. Lo siento —medio suplicaba tomando la muñeca de su novia.
- ¡Nada de "lo siento"! -exclamó haciendo el gesto de comillas con sus dedos.— ¡Esto no lo perdonaré fácilmente! -dijo decidida zafándose del agarre que JungKook ejercía sobre su muñeca.
- Vamos, amor. ¡No seas así!
- Si tienes algún problema con que sea así pues... pues... —tomó aire.— ¡Pues vete! —sentenció una vez más con total molestia.
— ¡Ya! No peleemos por esto –JungKook medio lloriqueaba medio reía debido a que le parecía cómico ver a su novia echando humos por una cosa tan simple.— ¡Es ridículo!
JungKook posicionó sus manos sobre los hombros de Aeryn; a su vez ella soltaba una risa sin gracia.
— ¿Ridículo? —empujó con brusquedad las manos del chico.— ¿Crees que mis sentimientos son ridículos? -preguntó ofendida.
JungKook soltó una risa.
— ¡Sólo era un paquete de gomitas!
– ¡Mi paquete de gomitas! —contraatacó, recalcando la primera palabra.
El muchacho alzó sus manos, esta vez dejándolas caer sobre la cintura de la joven.
— No te enojes por eso, Jagi.
– ¡Para ti es fácil decirlo! —lo miró con recelo.— No fuiste el que especialmente se dió el tiempo de ir a comprar un delicioso paquete de gomitas sólo para saciar las ganas que tenía por comer golosinas. Lo hice con tanto amor y dulzura —entrelazó sus manos juntandolas en su pecho, mirando un poco más arriba de JungKook con una sonrisa; tal como si estuviera imaginando el momento exacto de cuando vió los adorables ositos de gomitas.— Y luego, llego a casa con la esperanza de probar las gomitas en forma de ositos.. —cambió su sonrisa por una mueca de desagrado, posando su fulminante mirada en los ojos ajenos.— ¡Para encontrar el maldito paquete en el tarro de basura!
— ¿Lo lamento?
— ¡Claro que debes lamentarlo! ¡Es como si me devorara el último trozo de pizza! —dijo con obviedad.— No me vuelvas a dirigir la palabra en todo el día, Jeon Jung Ko—
No pudo seguir protestando debido a que los labios del chico sobre los suyos acabaron con todas las palabras.
Aeryn se removió en su lugar con sorpresa, pero en menos de un segundo yacía dándole paso libre a la lengua del azabache dentro de su cavidad bucal. JungKook acercó el cuerpo de Aeryn mientras que ella envolvía sus brazos por el cuello del joven, profundizando aún más aquel sonoro beso.
Acarició el sedoso cabello de JungKook con suavidad, a la par que él deslizaba sus manos por las caderas de la joven hasta topar con su trasero; el cual apretó a su gusto, haciéndola sobresaltar
Aeryn sonrió con malicia al rozar "sin querer" su centro con la hombría de JungKook, acción que hizo suspirar al último nombrado.
JungKook estaba por llevar a cabo la idea de pasar al siguiente nivel pero Aeryn fue más rápida y acabó abruptamente el lujurioso beso.
– JungKook.. -susurró sobre sus labios con la respiración notablemente agitada.— Tengo sueño.
Se separó completamente de él con una sonrisa triunfadora, mientras se daba vuelta dando pequeños brincos en dirección a su habitación.
— ¡Aeryn, no me puedes dejar así! —lloriqueó frustrado.
— ¡Claro que puedo! –soltó una sonora risa burlesca.— ¡Es mi venganza!