(nota al final.)
Casi seis meses pasaron desde aquella vez en el patio de la escuela donde Aeryn tomó la decisión de mandar a volar sus sentimientos por el azabache, consiguiéndolo con éxito.
En sus sueños.
Simplemente no podía.
Se convenció de que jamás serían algo más que amigos, por muy triste que fuera esa era su actual realidad. Por lo mismo, decidió acercarse al mayor sin segundas intenciones. Si no podía ser su novia por lo menos intentaría ser una buena amiga.
Y eso le funcionó de maravilla.
Sorpresivamente ambos tenían más en común de lo que imaginaban, en poco tiempo se volvieron como uña y mugre. Cada que tenían ratos libres la pasaban juntos, hacían pijamadas, tenían largas llamadas hasta la madrugada, conversaciones sobre variados temas de sus intereses, ambos se cuidaban mutuamente. Eran la combinación equilibrada para una bonita relación.
Claro que Aeryn no intentó sobrepasar la confianza e ir a algo más, pues JungKook tenía novia y ella lo respetaba.
Pero las cosas no siempre salen como uno las planea.
(...)
JungKook y Aeryn estaban en medio de una pijamada en la casa de la última nombrada, sentados en el piso de la sala bebiendo.
— Quiero ser una pantufla —comentó embobada la pelirosa.
— Aeryn..
El lugar estalló en risas provenientes de ambos jóvenes que yacían más que borrachos, un poco más Aeryn pues había tomado como si la vida se fuese a acabar.
— JungKook.
— ¿mmh?
— Súbele el volumen —pidió en un susurro al oír como i wanna be your girlfriend de girl in red se reproducía por el equipo de sonido. Era una de sus canciones preferidas, solía llorar mientras la escuchaba.
— Oh Hanna, I wanna feel you close.. —comenzó a tararear la canción a la par que bebía directamente de su botella de soju, hundiéndose en su propia tristeza bajo la atenta mirada de su amigo.
JungKook traducía en su mente la letra de la canción, sintiendo una extraña corriente recorrer su cuerpo mientras sus ojos solo se enfocaban en su acompañante que se miraba cada vez más linda a pesar de no estar en su mejor estado, ni en sus cinco sentidos.
— ¿Qué ocurre? —cuestionó con preocupación el pelinegro al percatarse como finas gotitas de lágrimas corrían por las mejillas de Aeryn, ganándose de inmediato una dudosa respuesta.
— No lo sé —elevó y dejó caer sus hombros con desinterés.
— Linda, puedes decirme lo que dese-
— me gustas —confesó sin siquiera inmutarse.
JungKook entró en un pequeño trance. Hace unos meses atrás sin dudar habría rechazado a la chica pero ahora...
ahora ni él sabía qué sentía por ella.
Todo era tan confuso.
— Me gustas desde hace un año y medio, ¿sabes? Sabía que no tendría oportunidad contigo pero aún así lo hice, me enamoré de ti y de tu boba cara, de tu boba personalidad que cada día me envuelve más, mierda —soltó una tonta risa como si se estuviera burlando de sí misma, y así lo era.
— Aeryn, estás borracha, no sabes lo que dices —un JungKook exasperado intentando buscar una explicación razonable para no creer en las palabras de su contraria se hizo presente, haciéndola reír un poco más.
Aeryn acabó de un trago todo el contenido sobrante de su botella, dejándola a un lado para avanzar a flojos gateos hasta quedar a unos poco centímetros de el rostro confundido del chico.
— I don't wanna be your friend, I wanna be your bitch.. —cantó débilmente con una ligera sonrisa adornando su rostro, conectando su brillante mirada con la del azabache.— and i wanna touch you, but not like thi-
De un momento a otro sus labios tocaron el cielo, así se sentía. JungKook había cedido al gran impulso que inundaba todos sus sentidos por probar los labios de su querida amiga que hacía latir su corazón con frenesí sin que él lo pidiera.
Las manos del azabache tomaron con delicadeza las mejillas de la chica, dando dulces caricias sobre estas quitando todo rastro de lágrimas. Y las manos de ella se posaron sobre los fuertes brazos del muchacho, sonriendo embelesada entre el beso al sentir como todo en su interior se desbordaba y colapsaba al caer en cuenta que estaba viviendo uno de esos momentos que creaba en su loca imaginación y que solo se veían como una lejana ilusión.
Pero como nada dura para siempre, la falta de aire hizo presencia en ambos luego de largos segundos, dando fin con aquella sorpresiva acción.
— Yo..
JungKook entreabrió los labios sin la menor idea de que decir o qué hacer, su mente decidió dejar de funcionar hasta que esta vez Aeryn tomó la iniciativa de pegar sus labios cortamente.
— I wanna kiss you until I lose my breath..
Eso fue lo único que JungKook necesitó para mandar a volar su cabeza y seguir los llamados de su corazón por sentirle cerca.
No pensó en nada más que en ella, esa noche solo eran ellos y su mundo donde no existían preocupaciones o personas que pudiesen arruinar aquel potente deseo que sentían por el otro.
Luego verían como arreglarían esto.
Ahora solo se besarían hasta perder el aliento.
kTMLFMDEKD no mgtó
mxo como quedó. 🥺probablemente estos días estaré editando algunas cosas de la historia y esop.
también estaba pensando en dejar pedidos abiertos o una hueá así, idk. Igual es una idea muy al peo pero acepto pedidos. <33
en fin, disculpen cualquier falla ortográfica.
—cc