7. Primera posesión...

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Lunes 12 de abril, son casi las once de la noche y tuve un día extraño. Hoy fue el Día del Niño y pasaron muchas cosas. El micro llegó temprano. Había mucho alboroto por la farándula que la promoción organizaba. Rocío sigue mal, aunque dijo pronto le darán de alta. Cuando estábamos en primaria solíamos jugar durante toda la farándula con ella, los cuatro juntos. Cómo extraño esos días.

Me quedé esperando a que el micro se vacíe. No me gusta que me empujen al bajar. Cuando estuvo despejado, me acomodé las gafas, salí y emprendí rumbo hacia mi curso. Al llegar noté que Diana aún no había llegado, me sentí algo desilusionado. Gabriel estaba con Sergio y los demás muchachos hablando de lucha libre, se veía distraído y distante, aunque Sergio tampoco permitía que se entristezca. Antes, su mejor forma de hacerle reír era haciéndole alguna maldad a Gaburah, mi primo. Pero desde que se retiró del colegio, Sergio se hizo de un nuevo chanchito, un chico regordete que ahora es víctima de sus bromas pesadas. No puedo negar que extraño a mi primo, por alguna razón ha estado haciéndome la ley del hielo, es como si estuviera enfadado conmigo. No sé si logre hacer que me hable de nuevo, aunque no pierdo la esperanza.

Me sumé a la conversación de los muchachos hasta que Diana llegó. Cuando abrió la puerta, los chicos abandonaron la charla y se quedaron mirándola, ni siquiera parpadeaban. Se veía increíblemente hermosa, llevaba puesta una blusa celeste y un pantalón entallado de tela de color blanco. Tenía formada una cola en su cabello y dos mechones le caían sobre el rostro, dibujando dos ondas castañas. A diferencia de las demás chicas, no llevaba maquillaje alguno, lucía muy natural.

—¿Acaso vieron un fantasma? —preguntó ella al ver que todos la miraban como si fuera la primera chica que ven en su vida.

—No, no. No es eso... Este, er... —balbuceamos algunos, otros no tanto.

—Es que pensábamos que eras el Regente y se nos enfrío el asterisco —dijo Lucio, sonrojado.

Los chicos regresaron a su conversación mientras yo me apartaba para conversar con Diana. Ellos murmuraban y se hacían gestos morbosos los unos a los otros. Diana no se daba cuenta que los demás chicos la habían convertido en una especie de fantasía. Empezamos a conversar sobre tonterías. Las chicas nos miraban y luego susurraban cosas, riéndose. Ciertamente, la situación logró incomodarme.

La profesora jamás llegó. Tanto chicos como chicas discutían sobre quiénes eran mejores, si los hombres o las mujeres. Diana y yo no hacíamos el menor caso, nos dedicábamos a conversar sobre el cercano cumpleaños de Oscar. Cumpliría veintiuno al día siguiente y la hermana de Diana le estaba organizando una fiesta. Yo creo que ya está viejo, aunque Diana odia que le diga viejo. Pensando en Oscar y Jhoanna noté que la relación de esos dos había estado bastante rara últimamente. Es difícil saber si son novios o amigos, se comportan casi como ambos; pero desde hace unos días han estado más como pareja. Eso realmente me perturba pues se me hace difícil aceptar la idea.

Pasó un poco más de una hora cuando por fin tocó la campana. Los dos primeros periodos terminaron y comenzó la farándula del Día del Niño. La ausencia de Rocío me puso melancólico, así que me alejé un poco para poder pensar a solas. Fui al auditorio, lo hallé vacío. El piano negro de cola, arrinconado en el escenario, me invitaba a tocar. Me senté frente a las teclas y dejé que la música surgiera. Primero toqué algo de Wolfang Amadeus Mozart y luego interpreté a Vivaldi, sentí que la nostalgia se iba aliviando y mi sesión de piano proseguía tranquilamente. Después de una hora de música clásica, decidí tocar algo más contemporáneo, un poco de Yanni Christian por aquí, algo de Vangelis por allá, me sentía tan bien. Entonces quise tocar algo mío, una composición. El sonido del piano me llevó a pensar en Diana y sentí deseos que ella estuviera conmigo. El título de mi creación lo decía todo: "El Retrato de Diana".

El Arco De Artemisa© - Primer Episodio, Prefacios de BatallaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora