¿Una merodeadora?

32

Cuando llega la noche nos vamos a dormir, pero yo no puedo.

*Casi te besas con él, por eso no puedes dormir Liz*

*¿Quién eres?*

*Tu conciencia*

*¿Te puedo llamar Ana? Vas a ser Ana, encantada Ana*

*Llamame como quieras pero dile ya que te gusta*

*No quiero que me use*

*¿Enserio Lizzy?*

*Si, y ahora me voy a dormir*

*No vas a poder...*

Cierro los ojos y doy vueltas por la cama, tenía razón... No puedo dormir. Me levanto y sin hacer ruido salgo al jardín, me tumbo en la hierba y miro las estrellas.

—Se lo tienes que decir Lizzy —susurro y cierro los ojos

A la mañana siguiente

Unos rayos de sol me dan en la cara y me despierto, me duele la espalda muchísimo.

*Claro, te has dormido en el jardín*

Entro y aún no hay nadie despierto, subo a la habitación de los chicos y los veo a todos dormidos, que monos y que lastima que vayan a despertarlos así. Abrí las cortinas de golpe y James y Remus de quejaron ya que eran los que estaban al lado de la ventana.

—¡Arriba! —grito y me miran mal, un cojin me da en la espalda y al girarme veo a Sirius mirándome mal

—No me mires así —

—No nos despiertes así —dice y se tapa hasta la cabeza

—Lizzy, son las ocho y estamos en verano —se queja Remus

—Yo la mato —dice Sirius y le devuelvo el cojinazo

—Como me lo vuelvas a tirar te... —no acabo y ya me ha vuelto a dar con el cojin en la cara