Me convertí en un príncipe demonio / Volumen 1: El Príncipe Demonio

Capítulo 11: Imprevisto

          Ya llevamos un buen tiempo caminando, desde donde estamos ya no se puede ver rastros del pueblo.

          Arnold se detiene.

-Ya nos encontramos lo bastante lejos y esta zona es ideal para pelear (Arnold)

          Llegamos a una parte del bosque donde no hay tantos árboles y el suelo no es tan irregular.

-Humano empieza a correr por los alrededores de esta zona, cuando la serpiente te empiece a perseguir tráela aquí (Arnold)

          ¡¿Eeeeeeeh?!

-Dijiste que este no era otro intento de matarme

-No lo es, solo tienes que hacer de carnada (Arnold)

          Pensé que quería mi ayuda para rastrear a la serpiente, pero resulta ser que solo quería una carnada...

-Escucha, las serpientes gigantes cazan de noche y se me ha informado que se la ha avistado por este lugar. Por lo que, debe ser su área de caza. Así que la mejor y más rápida opción para encontrarla es llamando su atención (Arnold)

-Es decir que actúe como si fuera una de sus presas

-Ya nos entendemos (Arnold)

          Sí, definitivamente está intentando matarme...

-Tenemos un trato, si haces esto por mi prometo cumplirlo. Además, eres muy veloz, la serpiente no te alcanzará (Arnold)

          ¿Esa es su manera de intentar tranquilizarme?... pero ya estoy aquí... no tengo más remedio.

-Espero que cumplas con tu palabra

          Arnold marcó el área con un montón de antorchas para que este bien iluminada, de esta manera no la perderé de vista.

          Luego de volverme un usuario mi vista también mejoro, así que solo con la luz de la luna me es suficiente para ver en la oscuridad.

          De esta manera me vuelvo a adentrar en el bosque y empiezo a correr por los alrededores de la zona en donde se encuentra Arnold para intentar encontrar a la...

-¡¡Serpiente!!

          No me costó mucho hacer que apareciera, corrí directo hacia ella ¿Cuánto mide esta cosa? Tenía su cuerpo erguido, por lo que lo confundí con el tronco de un árbol.

          También se sorprendió, supongo que no es habitual que su comida vaya hacia ella.

           Luego de verme intentó morderme, por suerte la esquivé exitosamente. Ya tengo su atención, ahora tengo que volver con Arnold.

          La serpiente me está persiguiendo ¿Cómo puede ser tan rápida si no tiene patas? Por suerte le logre sacar una distancia que me mantiene alejado de sus ataques.

          Ya veo la zona iluminada por Arnold.

-¡Arnold! ¡Aquí tienes tu serpiente!

-¿Cómo? ¿Tan rápido? (Arnold)

          Llego a la zona alumbrada por antorchas y rápido salto hacia un costado, lo que hace que cuando la serpiente llega se encuentra directamente frente a Arnold.

          La serpiente levanta su cuerpo, parece que se está preparando para pelear.

          Ahora que la puedo ver con calma, debe medir alrededor de unos diez metros y sus escamas son de un color azul oscuro casi negro.