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Seven:

Iba manejando en silencio, el chico en el asiento de mi lado estaba durmiendo y no tenía intenciones de despertarlo, le bajé un poco de volumen a la radio y sentí que empezó a vibrar mi celular, solté la mano de Ivo para contestar la llamada.

Lucrecia

¿Hola?

Hola cariño,
¿cómo estás?

¿Qué quieres, Lu?

Solo hablar contigo,
ya no respondes
mis mensajes y te
extraño mucho.

Yo ya no quiero
saber de ti, Lucrecia.

No seas así,
amorcito.

No me digas así,
estoy bien ahora
y no quiero que
arruines eso otra vez.

Ya te pedí perdón,
Joa, yo sé que aún
me amas, deja de
negarlo.

Oh no, estás muy
equivocada, estoy
enamorado de otra
persona ahora, a ti
ya te olvidé.

Ella nunca podrá
darte lo que yo,
te vas a arrepentir
luego, Joaquín.

Basta Lu, no quiero
saber más de ti,
deberías entender eso,
deja de buscarme, chao.

Me sentía muy alterado por la situación, mi celular volvió a vibrar, estaba llamando de nuevo, lo apagué para después tirarlo a los asientos de atrás.

Me molesta demasiado que me vuelva a buscar, hace días vengo recibiendo varios mensajes de ella, respondí los primeros pero cuando noté sus intenciones decidí dejar de hacerlo, no quiero que me busque más, me engañó y ahora viene a pedirme que volvamos, es muy tarde, mi corazón le pertenece a otra persona.

Me volví a enfocar en la carretera hasta que vi que Ivo se comenzó a mover, tal vez lo desperté, lo miré y abrí la boca para pedirle perdón por despertarlo pero no sabía si yo había sido el causante, no dije nada y miré hacia afuera.

¿Qué pasó, bebé? ¿Con quién discutías? -lo miré sorprendido, sí había escuchado la discusión, espero que no toda-

Oh, eso, era mi ex, nada importante -le respondí rápido, no quiero que piense cosas que no son- perdón si te desperté.

Uh, el niño tiene problemas amorosos, que mal -puso su mano en mi hombro y luego la quitó- y no pasa nada, sí ya llegamos.

Vi que los chicos estacionaron su auto frente a un portón, debíamos dejar los autos aquí y después seguir caminando, me estacioné a un lado de ellos, iba a explicarle a Serue que ella ya no es importante pero se bajó enseguida del auto, lo miré confundido y agarré la mochila con nuestras cosas para llevarla, busqué mi celular y lo metí en mi bolsillo, ahora me bajé yo del auto dejando el seguro puesto, me acerqué a los chicos que estaban bajando las cosas y los ayudé.

Ivo era el que llevaba menos cosas así que debió abrir el portón y esperar que todos pasaramos, los chicos se adelantaron bastante dejándonos solos atrás, pasé por la puerta y él la cerró, empezamos a caminar en silencio.

Si te lastimé; KayneaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora