Los cuervos eran la señal de que ellos estaban cerca.
*
Greamunt. Un pueblo envuelto por inmensas montañas y cerros, rodeado de un bosque frondoso y misterioso. Desde niña, la idea de que estuviéramos en el bosque...
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He vivido desde siempre en Greamunt. Nunca me pareció agobiante o inquietante, hasta que los conocí.
Devak Bach, Areu Dagger y Pax Dagger.
¿Mi vida sería más tranquila si nunca los hubiera conocido? Obviamente, sin embargo, ¿Qué sentido tiene una vida tranquila?
El primer misterio del pueblo que conocí, fueron esos tres chicos con belleza exorbitante y actitud irritante. Algo arrebató toda pizca de miedo y fue reemplazada con una ansiosa curiosidad. Los secretos de esos chicos eran tan cautivantes que solo deseaba seguir descubriendo más y más misterios.
Se mudaron hace dos años, llegaron en medio de la noche y a la mañana siguiente ya teníamos nuevos vecinos en el pueblo. Nadie sabía quiénes eran o de dónde venían. A pesar de poseer tanta belleza, jamás los vi convivir con alguien más en pueblo que no fueran ellos tres.
Eran distantes y misteriosos. Incluso algo aterradores a mi parecer, pero solo yo pensaba eso, las demás chicas decían que con lo atractivos que eran, lo demás salía sobrando.
Absurdo.
Recuerdo la noche que crucé palabra con ellos, estaban huyendo de una bestia. Ojalá nunca hubiera estado ahí.
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Es una nueva historia que intento escribir. Espero que les guste.
Me disculpo con anticipación por cualquier falta de ortografía.
