3. Tres Dias.

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Mi pulso se aceleró concentrándome en el problema.

__: ¿Dime quien eres y qué quieres de mí?-

Desconocido: Yo me llamo número 17, y lo que quiero es muy simple-dijo acercando su rostro a mi-Quiero un lugar donde quedarme-dijo alejándose y caminando de lado a lado en la habitación.

__:Un lugar donde quedarse, hay hoteles también existen lugares donde reposar.

17: Tu harás lo que yo te pida o te mueres-dijo quedito-Puede que ahorita mueras de un ataque al corazón-dijo apuntando con un dedo al pecho, con un brillo saliendo de sus manos.

Perdí el aliento por un momento y apreté mi mandíbula accediendo.

17: ¡Eso es!-dijo sonriendo Maquiavelicamente.

__: Pero recuerda usted número 17 puede que ahorita no tenga como defenderme pero encontraré la forma sea lo último que haga.-dije con voz temblorosa.

17: Te espero mujer- dijo poniéndose el sombrero.

Salió de la habitación colocandose el sombrero.

Inmediatamente llame al doctor, para hacer las preguntas necesarias.

Había dormido por una semana, justamente el día que fui agredida era miércoles y ya estamos Martes.

Mi mente había estado en completo shock y el tipo había venido a visitarme todo este tiempo, lo que pensaba es que era un criminal que estaba huyendo haciendose pasar por mí esposo.

Pasaron tres días y ahora era el día que me darían de alta, 17 se sentaba en el sillón a leer las revistas y el periódico, supuestamente me traía comida unas sandías al instante las tiraba al basurero y comía nada más la comida sin gracia que dan en los hospitales.

Pues internamente le rogaba a Kamisama que no me pasará algo malo.

Salí con la misma ropa que llevaba el miércoles antepasado con manchas de sangre, me habían retirado las vendas y en su lugar pasaron a gasas.

Antes de irme tenía que hablar con el doctor que me atendió en privado, el tipo que se hizo pasar por mí supuesto esposo espera afuera de la habitación con su mejor sonrisa fingida con un rostro de angel que no mata ni una mosca.

El doctor estaba sentado en su escritorio poniéndo toda su atención a lo que le diría.

__: Doctor le debo decir algo-dije poniendo la mano en mi pecho- ese hombre que está aya afuera no es mi esposo le ha estado mintiendo todo este a usted y a mí es un criminal.

Doctor: Señora no se altere, como ya le dije estuvo inconciente por cinco días.

__: Por favor... Créame corro un gran peligro.

 Créame corro un gran peligro

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Mientras Dormías ll Número 17Donde viven las historias. Descúbrelo ahora