Mientras Dormías ll Número 17

7: El conde

La noche se me hacía demasiado larga, no pude dormir a la mañana siguiente mandé una carta a mi jefe diciendo que pronto regresaría a trabajar.

Y pensé en mi accidente un carro me atropelló y luego aparecí en un hospital, tengo un supuesto esposo que es mitad robot.

Subi a mi recamara con pasos lentos recostada en la cama bajo mi brazo al suelo tocando con la punta de mis dedos el rifle bajo mi cama.

Estaba atrapada entre estas paredes no sé si soy cómplice o simplemente me tienen sin escapatoria.

Tocaron la puerta, salí de mi cuarto.

__: 17

Dije observándolo de arriba abajo junto a él venía una persona más.

Condé: ¿Ella es su esposa señor Dariel?

Preguntó el otro hombre que media 1.80, con cabello negro y ropa sumamente cara usado un moño en su cuello.

17: Estamos casados.

Dijo tomandome de los hombros detrás de mí, me presionó fuerte para que hablara.

__: He si, estamos casados.

Condé: que preciosa mujer tan encantadora tiene a su merced sherif.

__: ¿Sherif?

Condé: esta mañana fue nombrado como el nuevo sherif al llevar su cuerpo a la estación y nos hizo saber sobre su heroísmo matando al criminal que lo llevo a su muerte.

17: gracias Condé Gilbert.

Condé Gilbert: no hay de que, pero aceptarían ir a una fiesta en mi casa está noche es para recaudar fondos para el orfanatorio en nuestro pueblo.

Dijo sacando una invitación de su abrigo.

17: ¿y tú qué piensas __?

Dijo sonriendo suave y una vos diferente.

__: no lo sé, ¿dime quieres ir?

Nos miramos entre si como si fuera la pareja mas enamorada del pueblo.

17: aceptaremos su invitación.

Condé Gilbert: gracias sherif, los espero en mi casa me despido tengo que irme.

Dijo acercándose a mi dando un beso en mi mano.

Número 17 me miro por un momento haciendo una cara de asco y viendo a otro punto de la habitación.

__: gracias, le puedo decir Gilbert.

Condé Gilbert: claro que sí hermosa dama.

Dijo observando a 17 y luego a mi.

Se dió media vuelta y se fue.

Al ver la puerta cerrada número 17 se acercó a mí.

17: le puedo decir señor Gilbert –dijo inmitando mi voz se veía gracioso.

No pude evitar reír.

El arqueo una ceja y me observó atento.

__: haha te salen muy chistosas tus inmitaciones.

Número 17 frunció el seño.

17: Recuerda querida que estás Casada y que no puedes coquetear o el siguiente que acabere será el Conde...¡Me escuchas!