Noel no está loca.

Capitulo 6 parte 2 "Mi peor pesadilla se hace realidad"

-¿Que hace él aquí?

-Él es tu tutor, puede venir a ver como es tu procedimiento. –Dice Tifa.

-Él no es mi tutor, él no tiene que ser mi tutor.

-Pero lo soy, así que espero que estés mejorando, mi cariño. –Dice él acercándose a mí. –Yo solo quiero lo mejor para ti. –Acerca su mano a mi espalda y yo la retiro brutamente.

-Aléjate de mí, maldita mierda.

-¡NOEL! –Me reta Tifa. –Ese vocabulario ¿Quieres otro castigo?

-Si es la única opción que tiene para aprender, castíguela todas las veces que pueda, Hermana. –Dice él.

-Wow, wow, wow, tranquilo hombrecito que aquí no recibimos ordenes de un cualquiera y menos tuyas. –Lo hace entender ella y yo le doy una sonrisa. Él empieza a dar un paseo por la oficina y ambas lo miramos.

-¿Así que no soy nadie?

-¿Y tú qué crees? Noel, por favor quédate aquí, y tú ven conmigo. –Lo agarra de la muñeca y lo conduce para la sala de al lado. Lo que acaba de pasar no es normal, nada es normal.

Ellos entran y yo me acerco a la puerta de madera cerrada. Me arrimo bien pero no puedo escuchar nada. Ellos ya se conocen, por alguna razón ella le respondió así. No puedo pasar a la sala pero tengo que escuchar lo que dicen, quizá el maldito me puso en este lugar por alguna razón, tal vez para que no salga más. Recorro toda la oficina para encontrar algo de ayuda. Un vaso de plástico, esto me ayudara. Me acerco a la puerta y apoyo la boca del vaso contra ella, pego mi oído al otro extremo y escucho, se escucha claro.

-No la dejare salir sabiendo que lo que le espera será mucho peor. –Dice ella.

-¿Seguro que podrá salir? –Lanza una risa.

-La llevare yo.

-Oh tú no te la llevaras, no podrás ¿Sacar a una loca? ¿Acaso estás demente?

Se escucha un golpe en la mesa.

-La hara una de nosotros, así ella podrá salir. – ¿Una de sus qué?

-Intenta, quizás ambas se vuelvan locas.

-¡Eres el diablo en persona! –Grita ella. Escucho unos pasos y me alejo rápidamente de la puerta.

La puerta se abre. Su rostro tiene una felicidad y la de ella no, lo contrario. Esta toda colorada.

-Deja que hable con ella. –Dice él. Yo no quiero hablar con él.

-Tienes menos de diez minutos.

-Con dos minutos me sobrara.

Tifa sale por la puerta principal y la cierra.

-¿Qué quieres?

-¿Tuyo? –Se larga a reír. – Nada. Quiero saber dónde está el dinero de tu padre.

-¿Para qué?

-Para quedármelo.

-No te conformas con tener un techo, ahora vives de lujos, Rafael. –Le respondo enojada. Ana me conto que donde vivía no era un buen lugar pero él tenía un enorme corazón ¿Qué habrá echo? ¿Lo vendió? –No te daré nada, es el dinero de mi papá.

-Él ya no lo necesita –Se acerca a mí. – ¿No lo recuerdas? Él esta..

-¡OH MALDITO HIJO DE PUTA, CIERRA TU PUTA BOCA O LA PAGARAS!

-Bueno, entonces… -Él se sienta en el escritorio. –Tengo una propuesta, y no tendrás que hacer nada al respecto, aunque tampoco puedes.

-¿Qué?

-Mira, tu madre no podrá verte, solo yo puedo ya que yo soy tu tutor en este lugar. Ella no sabrá nada de lo que te diré, y tú vivirás con la duda si lo hice o no.

-Habla.

-Me casare con tu madre, luego la matare y todo el dinero de la casa será mío.

Es una mierda de persona.

-No te atrevas.

-Entonces dime donde está el dinero.

-No te lo diré.

-Alguien morirá…

-Bien, te lo diré pero con una condición. –Él inclina la cabeza con una enorme sonrisa. –Yo te diré dónde está el dinero, pero si no le haces nada a Ana.

-Muy bien, eso fue mi propuesta desde un principio.

-Tu propuesta fue matarla, y no he terminado.

-Pues habla.

-Te lo diré aproximadamente en un mes o dos, pero quiero que todas las veces que vengas, me digas que está bien y me traes algo para que yo sepa que estas en lo cierto.

-Evidencia…

-Sí.

-Sería más rápido que me case y la mate.

-Ana está preocupada por mí, ¿crees que se casara? Tendrás que esperar unos meses.

-Estas en lo cierto, pero si ella acepta, pierdes.

-¿Cuánto tiempo me quedare aquí?

-No lo sé, quizás por siempre.

-No estoy loca, hijo de puta. Simplemente no quería ver más tu puta cara.

-Oye, por qué te preocupas por tu madre? Muerta ni la ayudarías.

-Fue una estupidez mía.

-Y ahora estas aquí…

-Mira, si te casas con ella... –Trago saliva. –Cuando yo salga, tendré que ir a vivir contigo, serás mi padrastro legal.

-¿Quién dijo que saldrás de aquí?

-No estoy loca.

Él se para y se vuelve a acercar a mí.

-Recuerda, todos los normales se vuelven locos en un loquero. –Susurra.

Tifa me acompaña a mi cuarto. Ella está dispuesta a ayudarme, lo dijo cuando hablaba con Rafael. Aun no me ha dicho ni una sola palabra, pero se le notan los nervios de punta a punta. Cuando Rafael se estaba yendo, ella cerró la puerta principal del internado y dio un fuerte suspiro. Ellos ya se conocen, y se conocen bien.

Llegamos a mi cuarto y lo abre, señala con la mano para que entre. En la otra cama hay una chica de pelo largo oscuro y tez blanca.

-Hola. –La saludo pero ella no me responde, me dirijo a mi cama y me acompaña Tifa.

-Ella es Belén, es nueva. –Belén se voltea y apoya su cabeza en la pared. –Volviendo al tema, mira Noel, conozco a ese desgraciado, puedes contar conmigo para lo que sea, no tengas miedo, yo voy ayudar pero por ahora voy abajo que tengo que registrar a los nuevos, en una hora volveré. –Acaricia mi mano y se va.

Ambas quedamos solas, ninguna se dirige ni una sola palabra, tampoco estoy de humor para empezar una charla. Tengo que ver la manera de que Rafael no se salga con la suya, siempre le dije a Ana que él es una basura de persona pero ella nunca me hizo caso, tengo que buscar la forma de ayudarla, pero dentro de este lugar no puedo, voy a necesitar ayuda para salir de aquí. Los chicos, ellos quieren salir y lo vamos a lograr.

Tal vez James tiene razón, yo los voy a sacar.