Harry.
Ser el nuevo y en sima un fenómeno apestaba. Lamentablemente Harry sabía de eso. Pero aún más apestaba que sus archienemigos, las estrellitas de la clase de gimnasia , es que se pusieron como meta para sus vidas hacer al ojiverde la persona más miserable de la Tierra. En parte lo estaban logrando. Si mi madre supiera - pensó el rizado - no me pondría la estúpida queja de las malas notas del año pasado. Cuando habló con el consejero escolar y vio sus terribles calificaciones casi se infarta, pero este año le estaba llendo mejor y además cuando se dio cuenta de que su sermón no surgía efecto en Harry, se dio por vencida y dejó de monologar.
Una chillona voz femenina lo sacó de sus protestas internas:
- Harry - exclamó Gemma para captar la atención de su rizado hermano - ¿cómo te fue hoy en el instituto?
- No quería interrumpir tu interesante charla con nuestro amado padre - respondió Harry sarcásticamente haciendo un gesto de comillas con las manos cuando dijo "amado padre".
- Oye ricitos, no te pongas insolente - Aunque no parecía (ya que Harry era un palmo más alto que Gemma) ella era la mayor
- Ahora hablando en serio ¿por qué lo llamaste papá? Antes no lo hacías.
- Lo se. Creo que le gusta que le diga papá - respondió la castaña encogiendose de hombros - ¿Cómo fue?
- ¿El qué?
- Haber estado con tu papá.
- Bien, supongo. Dormía en el sofá, pero pasaba desapercibido porque, ya sabes, él y su mujer no han tenido adolescentes. No quería ser molestia.
- Me extrañaste?
- ¡Claro! Han sido bondadozos, pero no tan divertidos como tú - Ya sea por el estrés acumulado o porque estaba sentimental no pudo contenerce y abrazó a Gemma. La había extrañado muchísimo esos meses que Clarence lo había echado de la casa. Volvió bajo la supuesta condición de que me quiera integrar a la familia, pero Harry cree que a estar alturas ya todos saben que no es así.Se separó del abrazo de Gemma y fue a su habitación, quizás allí podría relajarse un rato, estaba cruzando la sala cuando Simon y Rusell se estaban peleando. De nuevo. Estabn a punto de golpearse justo al lado de Harry. Su madre pasaba por ahí con el canasto de ropa para lavar y casi tira todo, por lo que se enojó y los echó. Sí, a todos.
- Mamá - lloriqueó Harry - quiero entrar. Me tengo que bañar ¿No quieres que vaya completamente sucio a la escuela, verdad?
Anne lo ignoró olímpicamente provocando un estremecimiento de miedo en Harry, generalmente se bañaba antes de que llegue Clarence, sobretodo porque el baño no tenía puerta, sino una cortina que había sido arrancada. Mierda, suspiró el ojiverde. Fue un rato a ver que hacían sus hermanos y a hablar con ellos un rato, cuando volvieron a entrar para cenar. Ellos no cenaban hasta que el borracho llegaba de trabajar, así que supuso que este repugnante ser ya había vuelto a la casa. Lo único que le consolaba era subirse al bus mañana, iba a verlo a él. Y con él se refería a un muchacho de ojos azules que todos los días se sentaba a su lado en el autobús. Harry supuso que no le hablaba porque era raro, y coincidía plenamente con el castaño. Él se sentía raro, pero lo intentaba camuflar en una máscara de ironía y sarcasmo.
Corrió algo de aire frío por lo que deseo tener una chaqueta, el clima lo ameritaba. Entró en la casa siguiendo a Gemma, y Clarence estaba en el sillón. Pasó prácticamente corriendo y definitivamente en esos momentos quería un chaqueta. Comieron queso a la parilla, lo cual no estuvo nada mal, y se puso a preparar la mochila para el día siguiente mientras tarareaba "Here Comes the Sun" bajito, para no despertar a nadie. Esperó internamente que el chico de ojos azules que se sentaba a su lado lleve otro cómic mañana, quizás lo leerían juntos. También esperó que no lo haya seguido leyendo en su casa, lo cual era muy improbable pero aún mantenía cierta esperanza, se había quedado en la parte en la que Magneto destroza todo para poder ingresar a la mansión del militar que estaba con la novia de Sebastian Earnshaw cuyo nombre no recordaba. Quizás, tan solo quizás, hoy el señor mudo habia estado ocupado y no tuvo tiempo para leer, por lo que mañana podrían seguir leyendo juntos. Una sonrisa se le escapó cuando recordó que el castaño de ojos azules se había dado cuenta de que Harry estaba leyendo, porque esperaba hasta que terminara la página para dar vuelta la hoja. Estúpido chico lindo y educado. Tal vez el instituto no sería una mierda como el rizado se había imaginado.
Quizás podría decirle a su mamá que lo vaya a buscar, lo cual tenía muchas ventajas, pero el problema era que estaba trabajando y no tenía célular. Podría llamar a su padre para que le de un aventón, pensó Harry con ironía. El bus ya estaba doblando la esquina así que no le quedaba más remedio, y alguien le pateó sin querer el bolso. Harry en seguida lo estaba corriendo del camino y disculpandose hasta que reconoció al estúpido chico castaño. Inconcientemente soltó un bufido y vio como el ojiazul le lanzaba una Como no tenía nada mejor que hacer fue a su habitación, y empezó a ver la caja que su madre había logrado recuperar antes de que su asqueroso padrastro tirase todo a la basura diez segundos después de haberlo echado. Además de los libros también había dos pequeños soldaditos de plomo que les hacían recordar al del cuento infantil, con los que hacía años solía jugar. A pesar de ello se alegró de que hayan sobrevivido al "huracán Clarence". Los puso en un montón y también vio que había papel y marcadores Prismacolor, lo cual alegró mucho al jovencito porque podría hacer una carta. Había plásticos rectángulares que cuando los leyó descubrió que eran tarjetas de promociones del centro comercial que olían a los más ricos perfumes - los cuales probablemente sumasen un valor mayor al de su casa entera - y algunos regalos de navidad de su tío que vivia en Sudamérica. Echo esto, no había nada que hacer con sus cosas, ya que no podía seguir escondiéndolas debajo de su lítera porque los niños lo descubrirían y harían un completo desastre, por lo que se las arregló para ordenar todo y separar los libros para poner el otro montón en una bolsa de basura y apretujarla en algún rincón en el estante más alto del armario , detrás de las toallas y un humidificador.
Fue a su lítera y el tonto perro estaba ahí:
- Shoo - rezongó Harry mientras lo empujaba para que se mueva de ahí. El beagle rodó al suelo y salió ofendido del dormitorio.
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Divinuras!!!!! Les comento que a partir de ahora voy a subir cada dos días si puedo, pero voy a hcer una maratón de 3 capítulos porque me voy de vacaciones y no hay wi-fi, así que por este tiempo no voy a poder actualizar mucho a menos que vaya a un ciber, lo cual dudo mucho.
Whatever, les quería decir que si quieren que les dedique un cap solo tienen que pedirlo, pueden hacerlo por comentario o escribanme a mi tw @S4rcasticLouis. Las/os amo, ojalá hayan tenido una bonita noche buena y estén pasando una linda navidad.
PSDT: Vieron que va a haber un hashtag de #WeAreAllLarry?!!! *W*
PSDT2: VIERON QUE SOLO LIAM LE TWITEÓ A LOUIS POR SU CUMPLE?! INDIGNADA. DE HARRY ERA OBVIO BC MODEST ES UNA MIERDA, PERO DE NIALL ME RE SORPRENDIÓ, SIEMPRE ES EL PRIMERO EN SALUDAR A LOS CHICOS POR SU CUMPLEAÑOS. ZAYN NUNCA TWITEA PERO PENSÉ QUE HARÍA UNA EXCEPCIÓN POR SU MEJOR AMIGO CON EL QUE COMPARTEN LOS PORROS DÍA A DÍA AHRE (? BUE YA LES EXPRESÉ MI QUEJA.
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The story of Lou & I [Larry Stylinson]
FanfictionLouis, sus cómics y sus auriculares son inseparables a la hora de subirse al bus que lo lleva a la secundaria Saint German, en Doncaster. Va con la cabeza gacha y responde preguntas siempre y cuando sea extrictamente necesario, casi siempre consigue...