David y Diego 'El Hombre que me Gusta'

El Hombre que me gusta Cap 1. David

-Sabes que lo haré...

...

-'estaré contigo'

...

-'te amaré para toda la vid'-

...

♫......... I feel so close to you right now it's a force feel

I wear my heart upon my sleeve, like a big deal♫

-click

Apago mi celular con mucha molestia, tanta como para caer con mucho peso encima, por toda la pereza innecesaria que acumulo ahora. Dan unas ganas inmensas de tirarlo a la pared sin ninguna razón con el motivo perfecto para seguir durmiendo. Caigo en cuenta que la música no era para armonizarme dulces sueños. había que apagar la alarma de mi celular con algo de distracción porque debido a lo dormido que estoy, no lo logro como se debe. Faltaba solo mirar el reloj digital del radio reloj de mi mesa de noche.

-4:52 am... mrrgh - con rabia – ya es hora...

La cabeza parece nido de zancudos al rascarme con inquietud quitándome la pereza que sosega todo mi cuerpo. Después de estirarme y pisar ese frío suelo mañanero voy al baño. noto un bulto grande e incómodo enfrente del sanitario. Una erección que no deja que orine como me plazca. Aplico las distracciones a mi alrededor para que poco a poco pierda su vigor 'el superhéroe del sexo' residiendo de nuevo de incógnito sin percatarse de mis necesidades colaborándome en lo que debo hacer...

-casi que no...- ese chorro canta como la satisfacción del cuerpo al relajarse.

El baño debía ser rápido. No quiero llegar tarde otra vez al colegio y más, si es el primer día de clases por culpa de lo vago que soy para levantarme. Era el año predilecto para solo concluir la etapa de colegio a un año antes de entrar a la universidad, esa sensación de cómo iba a ser todo este año: bien emocionado pero ansioso a la vez, un sentimiento que es difícil de procesar después.

Busco mi ropa de colegio y para colmo de males no la organicé como había dicho mi madre ayer. quería estar en cama y seguir roncando como un vago sin trabajo. Encuentro primero los interiores azules oscuros en la punta de mi cama, después ubico un par de medias de color negro con puntos por lo poco que percibo por la oscuridad, el pantalón negro y la camisa del colegio blanca con el cuello rojo, negro y blanco y el escudo de la institución donde concluí medianamente el año pasado. uno de mis zapatos con suela blanca reside debajo de la cama, los que usaré para este año... pero el otro, maldita sea! El otro no lo encuentro.

-¿dónde está el otro? Lo peor es que no puedo prender la luz... ahh puta oscuridad- al seguir rondando como un estúpido con penumbra de mi cuarto, lo encuentro detrás de mi puerta en diagonal con las cuerdas desatadas – ¿porque demonios esta así? no recuerdo haberlo pues-

hago retrospectiva de lo que hice ayer...aprovechando mi último día de vacaciones

-aaaaa ya recordé... - recogiéndolo del suelo cerca de una bolita de papel - se me había olvidado que lo había puesto de soporte en la puerta, para que no se dieran cuenta de la paja que me hice a horas que no debía ahhhm... cosas que pasan

Con ambos a mi disposición, busco mi maleta con saco y paraguas incluido. mi celular, reloj, mi playlist en mi celular y un termo de agua lleno de stickers. Mi celular es el predilecto porque sirve a donde debo llegar cuando me pierdo. Sé cómo defenderme con el desayuno, preparo un sándwich de jamón y queso, con un poco de chocolate y leche en mi vaso predilecto con mi nombre impreso. Al lavarme los dientes, cojo mi bicicleta todo terreno negra con azul emprendiendo mi viaje al colegio. queda como a unas 7 cuadras de mi casa. Un ejercicio matutino que debo de volver a retomar.