Matthew, Erwin y Levi se encontraban en el comedor desayunando.
Levi estaba más dormido que despierto.
Pero no se quejaba, sobre todo porque Matthew lo estaba alimentando.
Ya que no podía mover su mano.
Los mayores se habían asustado muchísimo cuando vieron su herida y de inmediato quisieron dirigirse a un hospital.
Sólo se detuvieron cuando vieron a Levi llorar desconsoladamente.
No quería ir a un hospital. Le traían malos recuerdos.
Al final terminaron curando en casa su herida.
La desinfectaron y vendaron con maestría.
Pero a pesar de que había sido el día anterior los mayores no le dejaban mover la mano para nada.
¡Incluso le quitaron su hora de juego!
Se puso furioso pero los mayores lo compensaron con una tarta de chocolate, que se encargaron de darle ellos mismos.
Lo que había pasado el día anterior fue......
Algo que no quería recordar, pero tampoco es como si odiara a los mayores por lo que habían hecho.
Claro que no, Levi reconocía que fue culpa suya.
Era un joven egoísta.
Los mayores se habían preocupado por él desde el principio, le daban amor, comprensión y tiempo.
Sinceramente ni él mismo entendía que es lo que lo había llevado a querer irse.
Aunque......
Más que querer irse, fue la curiosidad.
Bien decían 'la curiosidad mató al gato'
Ahora Levi lo entendía de primera mano.
Se había acercado a la ventana por los débiles rayos de sol que se colaban.
No realmente con la intención de escapar.
Aunque no podía negar que ese pensamiento sí cruzó su cabeza.
Sin embargo, ya todo había quedado en el olvido.
O al menos un poco.
Pues los mayores no se habían separado de él ni un poco.
Siempre alguno de los dos estaba con él.
Cuando cerraba sus ojos ellos estaban ahí y cuando los abría también estaban ahí.
Casi como si supieran en qué momento iba a despertar.
Levi no se quejaba.
No podía.
Sabía bien que era su culpa.
Les había hecho creer a los mayores que quería irse cuando no era así.
Lo mínimo que podía hacer era no quejarse por ello.
Aunque no podía evitar la amargura dentro de él.
¿Por qué querría apartarse de los mayores?
Ellos le daban todo.
Y eso lo deprimía más porque él no podía darles nada.
Estaba tan metido en sus pensamientos que no notó cuando los mayores le hablaron.
"¡Levi!" Medio-gritó Erwin.
"¿E-Eh....q-qué pasa?"
"Te estaba preguntando si querías jugo" Respondió Erwin.
"Oh.....am estoy bien"
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Baby of vampires (ABDL)
VampiroLevi Anderson, un joven pianista con un gran futuro asegurado. Decide aplicar para una beca para el ENS, una de las mejores escuelas de música de Alaska. El único problema es que Alaska pertenece al territorio de los vampiros, por lo que, si desea a...