Encuentros

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Después de aceptar su destino decidió limpiar su rostro y ver como era su actual cuerpo, pero no había ni rastro de agua en la habitación.
Solo había un recipiente, parecido a un cuenco que estaba ahí con el objetivo de lavar cosas y no para eso personal.

Intento abrir la puerta pero estaba cerrada con llave, tal vez para evitar que vagara por ahí.

!Nada de esto lo hacia sentirse feliz de volver a la vida!

Decidió que lo mejor era sentarse en posición de loto y meditar un poco, las horas corrieron lentamente y para cuando se dio cuenta ya era de mañana.
Aun no podía contratar del todo el cuerpo lo cual era bastante extraño, si bien Mo XuanYu tenia un nivel de cultivo bastante decente no era no suficiente como para que el no pidiera utilizar su cuerpo.

El ruido de su estomago le hizo entender la razón.

Como cultivadores desde jóvenes había ocasiones en que practicaban la inedia para estar preparados en ocasiones de emergencia, claramente este chico nunca había practicado esta técnica.

Se decidió a abrir la puerta y buscar algo de comer, no importaba que eso significara destruir la puerta. Levanto el pie para dar una patada pero el sonido de pasos fuera lo detuvo, después una voz.

—¡Es hora de la comida!

Espero para ver si la puerta se abría pero parecía que nadie lo haría, su vista cayo y se percato de una pequeña abertura por donde se asomaba un tazón.

El sirviente volvió a gritar.

—¿Qué esperas?, saca el tazón cuando termines

La abertura era solo un poco mas grande que el tazón, ni siquiera un perro entraría por ahí, la comida consistía en dos platillos y una porción de arroz que licia muy desagradable.

Viviendo en Yunmeng toda su vida y siendo parte de una de las Cuatro Grandes Sectas, siempre había comido las mejores comidas, la sopa de su Shijie era un ejemplo de ello.

Shijie pensó ¿como se vera ahora?, seguramente seguirá siendo igual de hermosa,espero que el pavo real la haya echo feliz.





Hacia un año que no pisaba el Receso De Las Nubes, entre sus responsabilidades en Yunmeng y sus visitas a Ciudad Inmunda apenas tenia tiempo de algo, el lugar no había cambiado nada.
Continuo su camino, los discípulos la saludaban al verla pasara por ahí, si bien los discípulos de la generación de sus hermanos la trataban con respeto no era lo mismo para los pocos ancianos de secta que aun estaban ahí.

Después de los sucesos en la Ciudad Sin Noche Lan Qiren había sido recluido durante seis años y el resto de los ancianos habían sido expulsados de la secta, lo que habia dejado a los pocos que no habían participado en la masacre muy molestos con la secta Jiang.

—A–Shui— llamo Lan Xichen al verla —Es bueno verte después de tanto tiempo

Las veces que el Líder Lan y Lan Yue habían visitado Muelle de Loto ella estaba en Qinghe.

—Es bueno volver— respondió ella —¿Donde están los Junior?

—Tuvieron un exorcismo en Villa Mo.

Aquello capto toda la atención de Lady Jiang, sabía por quienes serian sus padres que el cuerpo que le fue ofrecido a su madre era de un joven llamado Mo XuanYu, ella lo sabia y había intentado ayudar al joven mientras estaba en Torre Koi, lamentable Jin GuangYao ya tenia sus ojos en el y tarde o temprano lo quitaría del camino.

—Espero que estén bien— dijo ella —¿HanGuang–Jun?

—Se fue con ellos

Entonces hoy era el día, Wei Wuxian finalmente regresaría, aclararía todo y esta misión que comenzó hace casi veinte años finalmente terminaría.

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