Reencarnado como Ikaros en DxD

Capítulo 16: Corazón.

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¡¡¡KONEKO-CHAN!!!, ¿QUIEN LE HIZO ESO?.

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Pov. Narrador.

El gritó preocupado y aterrada de Venelana mientras se tapaba con sus manos su boca aunque logro hacer eco por todo el jardín, las expresiones horrorizadas del clan Sitri y de los Phoenix estaba marcada totalmente en sus caras por el estado que se encontraba la nekomata incluso Raiser se lamentaba mucho por la pequeña ya que a pesar de ser un asco de persona, él jamás le desearía esto a sus esclavas y mientras que las Gremorys solamente miraban molestas por parte de Rias y Akeno, sus planes se acaban de ir a la miarda pero mientras tanto el resto solamente estaban preocupados por su compañera, Kiba y Xenobia quienes habían logrado despertado quisieron acercarse pero fueron detenidos por Saji quien señalo de manera muy disimulada a Ikaros quien debes en cuando miraba de reojo a su dirección, era como si un dragón marino estuviese en alerta sus sentidos para proteger su nido de los demás depredadores.

Mientras que Raiser ayudaba a nuestra Atzuky para que se volviera a levantarse y que Ikaros solamente se dedicaba a acariciar suavemente la mejilla de su linda gatita, su expresión quizás no dejase ver lo triste y culpable que se sentía, la impotencia se convirtió en enojo y sus alas como la energía divina se volvió extremadamente peligrosa para cualquier demonio que se le ocurriera tocarla.

Atzuky: H-Hermana d-debes c-calmarte.... por fav.. -fue rápidamente callada ya que recibió una mirada de muerte y todo el instinto asesino por parte de su gemela que la hizo helar su sangre.

Ikaros: ¿Puedes dejar de chillar? o ¿De verdad tengo que callarte por mi misma?. -exclamo fría y monotoma. Sus las comenzaron a brillar en señal de estar preparando un ataque directo y posiblemente con intenciones de hacer desaparecer la mitad del inframundo.

Su comentario había tomado por sorpresa a Venelana, había logrado escuchar como Ikaros acaba de amenazar a su propia hermana quien solo tembló un poco para asentir y quedarse totalmente callada.

Con los demonios.

Ravel: E-Ella a-acaba de amenazar a s-su h-hermana. -varios asintieron asustados.

Los concejales no se movían pero suplicaban a cualquiera que estuviese escuchándolos que les suceda un milagro, pues no querían que la pelirosada se enfocaran en ellos preferían mil veces sacrificar al maou o su propia hermana si eso saciaban la propia ira de la diosa.