Capitulo III

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Volviendo de su mundo donde mataba de mil maneras a su dueño, o a su maestro como queramos verlo, miro que el niño parecía muy pensativo y la veía fijamente deduciendo si confiar o no confiar en sus palabras, pero, como todo niño la curiosidad le ganaba, decidiendo seguir con la charla pendiente.

➖Dumbledore escondió a dos familias cuando supo de la profecía y porque solo había dos familias que habían enfrentado a Voldemort tres veces—tosió un poco.—Una era una familia de sangre pura, la familia Longbottom y la familia Potter. Ambas familias esperaban a un niño que parecía ser que nacerían a finales del mes de julio.

➖Pero—siempre había un pero.

➖Voldemort asumió que sería la familia Potter y de ser así debía acabar con el niño antes de que creciera y lo matara, molesto y furioso por saber de una persona que lo pudiese igualar en poder—recordando el berrinche de un loco sanguinario que hizo ese día al saberlo.--Nadie contó con que la vieja cabra se enterara de algún modo y los ocultara mejor usando el hechizo fidelio. Es un encantamiento tremendamente complicado que supone el ocultamiento mágico de algo dentro de una sola mente. La información se oculta dentro de la persona elegida, que es el guardián del secreto. Y en lo sucesivo es imposible encontrar lo que guarda, a menos que el guardián del secreto opte por divulgarlo a menos que esté lo haga por su propia voluntad.

➖Entonces el guardián asignado a mis padres fue...--pensando en ese sujeto.

➖Para todos fue Sirius Black quien delató a tu padres esa desafortunada noche donde murieron—siseo un poco.—Pero el no era el guardián, en realidad fue una rata asquerosa de nombre Peter Pettigrew. Sigue vivo, oculto en algún lado después de que Voldemort desapareciera y todos creyeran que esta muerto.

¡Mis padres se ocultaron para salvarme la mi vida y uno de sus amigos, alguien cercano a ellos los traiciono—molesto y se nota en su mirada sombría.—y culparon a otro para encerrarlo sin evidencia alguna!. ¡¡Todo por un maldita profecía de una loca adivina y yo estoy aquí protegido por mi tía quien puede morir!!.

El solo se levantó para aventar la lámpara estrellándola contra la pared donde se rompió en pedazos y su magia comenzó a desplegarse por el lugar, agitando todo y ella tranquila para solo reparar dónde estaba el y subir por su cuerpo, enredándose poco a poco en el para solo calmarlo con sus caricias hasta que comenzó a calmarse y a llorar, pero eran sollozos pequeños hasta que lloro más fuerte.

Saber la verdad dolía pero era necesarios aún si fuese un niño.

Un niño que odiaba a la persona que traicionó a sus padres, al viejo que solo lo quería para vencer a un mago que ya esta muerto, volviéndose un huérfano de padres y siendo un niño con un destino por una profecía que decía que sería así.

Odiaba todo, odiaba vivir lejos de su hogar real.

Odiaba esconderse o esconder que era algo superior a esos inferiores seres que no era más que normales sin talento alguno.

Horas después.

Ya calmado, acostado y viendo a la serpiente que parecía cómoda.

➖Nagini mencionaste antes que buscabas a tu amo—recordando ese detalle.

➖Las criaturas mágicas como yo cuando encontramos a un mago lo suficiente digno para seguirlo como si fuese nuestro maestro hacemos un pacto de sangre con el, convirtiéndonos en su familiar—explicándolo mejor.—Al estar vinculados, nosotros podemos sentir si está en peligro o al revés. Lo defendemos si con eso terminamos matando a quien lo daña. Y si muere nosotros morimos al no romperse el vínculo.

Extraña familiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora