Un lindo gesto

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Iba a ser la primera vez que Kira iría a un partido de Iwaizumi, quería que fuera una sorpresa para él por lo que no dijo nada.
Esa mañana se peinó en dos colitas, se puso su uniforme, tomó su bolsa donde tenía un pequeño detalle para su novio y se fue sola a la escuela. Una vez en la cancha subió a las gradas hacía donde se encontraban los alumnos de Aoba Johsai, notó a aquellas tres chicas con las que había tenido contacto durante el viaje y se sentó a su lado.
— Me alegra que ahora sí podamos decir que eres la chica de Iwaizumi-san – dijo Nanami a modo de saludo.
Kira se sonrojó.
— Supongo que no podía negar lo que estaba sintiendo – contestó encogiéndose de hombros.
— Será bueno que animes muy bien a Iwaizumi-san – recomendó Akane.
— Claro, por favor ayúdenme en eso – les pidió Kira.
— ¡No hay problema! Siempre animo con la esperanza de que Oikawa-san me note – contestó Chika.
Kira rió.
— Eso va a ser difícil, Shittykawa no ve a nadie más que a él mismo – comentó aún riendo.
Chika ya no había tenido tiempo de preguntarle su relación con el castaño, ya que comenzaron a repartir los altavoces de plástico y los aplaudidores inflables para las porras al equipo.
— ¡Ooooooooooooohhhh! ¡Seijo! – gritó el chico que dirigía la porra.
Todos comenzaron repetir aquello después de él.
Los jugadores comenzaron a salir y la porra se hizo más fuerte.
— ¡Ike Ike Ike , Seijo! ¡Ose ose ose, Seijo! – gritaban todos al unísono.
El partido comenzó y todos se volvieron aún más frenéticos.
Kira estaba sorprendida, recordó cuando conoció Iwaizumi hace un par de meses atrás y la seguridad con la que había dicho "Yo soy la estrella de Aoba Johsai"; ahora que lo estaba viendo se dio cuenta que lo había juzgado mal. Definitivamente merecía
aquel título.
Después de haberlo anotar otro punto no pudo más y bajo hasta estar a la orilla de las gradas donde pudo recargarse en una pequeña pared, puso sus manos al rededor de su boca para hacer eco y gritó con todas sus fuerzas:
— ¡VAMOS, IWA-CHAN! –
Cómo si no hubiera miles de personas gritando y animandolos Iwaizumi volteó instintivamente a las gradas buscando entre toda la gente. Kira comenzó a agitar su mano para que la viera y él simplemente sonrió.
Después de aquello Kira vio como es que él comenzó a esmerarse aún más.
Terminaron ganando ambos sets por varios puntos, después de que los otros jugadores se fueron y el equipo dio las gracias por irlos a ver dejaron que los estudiantes pudieran bajar a las canchas.
Automáticamente todas fueron en busca de Oikawa, dándole varias cartas de amor y pidiéndole fotos. Kira fue directamente con Iwaizumi, éste sonrió al verla.
— Realmente no mentías aquella vez, ¿eh? – dijo Kira cruzando los brazos y sonriendo.
— Nunca miento cuando digo que soy la estrella – contestó él regresandole la sonrisa.
Kira estaba nerviosa y sacó de su pequeña bolsa algo.
— No sé que se supone que diga cuando hago esto pero ten – dijo ella extendiendo la mano.
A Iwaizumi se le iluminó la cara de tan solo ver aquella carta que estaba extendiendo Kira. La tomó con una gran sonrisa y toda la emoción del mundo.
— Pudiste decir "acepta mis sentimientos" o al menos ser más tierna, ¿sabes? – contestó él a forma de burla a pesar de su emoción.
— Idiota... Esos ya los aceptaste – dijo Kira sonrojandose un poco.
Hajime comenzó a abrirla.
— ¡¿Ah?! ¡¿La leerás en frente de mí?! – gritó ella al ver lo que hacía.
— Tengo curiosidad, nunca he recibido una carta – contestó él mientras la sacaba.
La letra de Kira era impresionante, cada caracter estaba trazado con mucha delicadeza y se podía sentir el cariño con el que realizó esa carta incluso antes de leerla.
Querido, Hajime :
Se que soy muy mala expresando mis sentimientos y por lo mismo siempre termino mis frases diciéndote "idiota" o "tonto", pues es la primera vez que siento algo así por una persona.
La verdad es que desde que te conocí me gustaste mucho y no supe cómo reaccionar a eso, pero cuando ví que me mudé justo a tu edificio no pude estar más feliz. Sé que he sido una chica difícil de querer y que tal vez te saque de quicio varias veces, sin embargo quiero que sepas que mi amor por tí es real.
Espero poder pasar mucho tiempo a tu lado y aunque llevemos solo un par de meses juntos has logrado llevarte gran parte de mi corazón y mi cariño.
Debo confesar también que esto me da mucho miedo, no quisiera que llegue el día en el que dejes de sentir esto por mí o que veas lo rota que estoy realmente veas que soy irreparable.
Estoy ansiosa por seguir conociendo cada vez más de tí y pasar tiempo contigo. Gracias por darme la oportunidad de estar a tu lado.
Te quiero mucho.
Kira.
Iwaizumi levantó la vista para ver a Kira quien estaba sonrojada esperando a que terminara de leer aquella carta, se acercó y le dió un beso en la mejilla.
— Te quiero mucho, tonta – le dijo con mucho cariño y ella lo abrazó.
— Que quede claro que te estoy abrazando a pesar de que estás lleno de sudor – dijo ella mientras se acercaba más a él recargandose en su pecho.
Iwaizumi jugueteó un poco con su cabello mientras la abrazaba.
— Me gusta como te ves peinada así – comentó él.
— Tonto... – fue lo único que pudo decir mientras se escondía para que no viera que tan sonrojada estaba.
— Es inútil esconderse, tus orejas también se ponen rojas – dijo él riendo, fue entonces que ella dejó de abrazarlo y lo empujó.
— Ya deja de decir esas cosas, mejor vamos a comer – dijo ella comenzando a caminar.
Iwaizumi la alcanzó fácilmente y tomó su mano.
Sonrió mientras jugaba con sus manos entrelazadas.
En serio esperaba que aquello nunca terminara.

It's not like I like you !  ~ Finalizada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora