-Va tronco que ya estamos en mi casa.-dije cojiendole por el hombro.
-Gracias wacho.-me sonrió.
Como pudimos subir nos quedamos en el sofa medio muertos y decidí hacer cafe, eran ya las 7 de la mañana.
Mateo se fué recuperando y ya estaba bien.-¿Donde esta la cama wacho?-dijo con voz entrecortada.
-En mi cuarto.-dije señalandolo.
Tristemente mi cama es solo de una persona.-¿Cres que cabemos en esa cama?-le digo.
-Ya nos las apañaremos.-me dice sonriendome.
Entramos a la habitacion y directamente me meto en la cama ya que estaba agotado, pero el no queria dormir vestido y se quitó la ropa. Toda la ropa. Volví a verle desnudo, ya no me sorprendió por lo que pasó dias anteriores.
-No te importá no wacho?- me dice preocupado.
-No no, tranquilo.
Vuelvo a repetir que la cama era pequeña.
Entra en la cama y me da la espalda, noté su suave piel entrando en contanto con la mia, estaba caliente, pocos minutos después empezó a roncar.
Yo mas tarde me levante a desayunar, no pude conciliar el sueño y estaba muerto de hambre.
Por alli a la 1 de la tarde volvi a la cama a intentar dormir un poco y lo conseguí.