Scp's are the types of boyfriends

scp 173

«scp 173 es el tipo de novio que. . .

Es un total psicópata. . .

Narra escritora

Hoy era tiempo de limpiar la sala de contención de scp 173 y por petición de tus superiores siempre debes de estar presente en estos, para evitar una brecha de contención o demasiadas muertes del personal de clase D, la verdad su relación amorosa había sido de mucha ayuda para controlarlo, aunque sea un poco.

Una joven de cabello rojizo y ojos ligeramente rasgados, de ropa aparentemente de doctora caminaba junto a tres hombres del personal de clase D y dos guardias que cuidaban no se escaparan o intentarán hacerle daño a la doctora. La joven doctora explicaba de manera detallada los pasos que deberían de seguir para la limpieza de la sala de contención de scp 173 y para posiblemente seguir con vida.

—Tengan mucho cuidado y no olviden por nada del mundo, avisar cuando vallan a parpadear— Repetía por cuarta ocasión la doctora quien parecía en cierta forma preocupada, la otra semana se había “peleado” por así decirlo con su novio.

Si bien no fue una pelea como tal ya que mientras ella le reclamaba a Scp 173 el solo se dedicó a ignorarla y mirar para otro lado, aún así la doctora ______ estaba nerviosa, preocupada y en cierta forma arrepentida de su comportamiento de la otra semana, no sabía cómo podría mirar a su novio a los ojos.

Finalmente llegaron a la sala de contención de scp 173, estabas nerviosa, casi queriendo dar la vuelta y no volver hasta que te sintieras totalmente lista, no sabías si ahora estaba molesto contigo o quería dejarte, porque eso significaría tu muerte segura.

—Doctora, ¿Se siente bien?— Preguntó uno de los guardias con un rostro de preocupación que no podías ver, tú solo negaste dando a entender que no estabas bien, no tenías porque mentir, no querías estar ahí y punto.

—Le diré a mi supervisor que quiero irme— Sin más te alejaste de la sala de contención de scp 173 no sin antes dar una mirada rápida, las puertas empezaban a abrirse y por un instante notaste a un 173 sentado sin moverse en una esquina de la sala. —Lo siento— Murmuraste antes de salir completamente del lugar.

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Milagrosamente el supervisor había aceptado que salieras más temprano ese día, después de todo sabía el riesgo que corrías al estar con el scp 173 y también no querían perder a una de las mejores doctoras de la fundación, lo cual parecía que lo hacía más por conveniencia, pero no importa.

Caminabas por los pasillos ya dispuesta a irte, tenías algo perdida la mente, no dejabas de pensar en todo y la verdad estabas arrepintiendote nuevamente de tus acciones. —Maldita indecisión—. Murmuraste para ti misma antes de regresar sobre tus pasos y intentar darle fin a tu inseguridad.

Seamos realistas apenas diste un par de pasos de regresos te arrepentiste en seguida y diste la vuelta, el amor tóxico no vale la vida.

Tus pasos eran lentos y tú mente te comía de a poco no querías irte y mucho menos quedarte en ese lugar. —Dios, ¿Qué debería hacer?—. Poner tu decisión en las manos de 343, que buena idea doctora. Una alarma empezó a sonar inundando los oídos de todas las personas de la fundación SCP. —¿Por qué hay tantas brechas estos días?—.

Te quedaste congelada un par de segundos, Dios te dió una señal y era que te fueras de ese lugar lo más rápido posible sin mirar atrás y olvidar totalmente la inseguridad que te mantenía dentro. Pronto un grupo de doctores he investigadores empezaron también a correr a la salida empujando tu cuerpo y golpeándolo un poco.