Scp's are the types of boyfriends

scp 662

«Scp 662 es el tipo de novio que. . .

Al principio solo lo usabas para que te ayudará en tu trabajo y te diera masajes»

—Y es por eso que pensamos en compensarte—. Decía tu superior mientras tú solamente terminabas de revisar el papeleo sin poner mucha atención en el "parloteo" de tu jefe.

—¿Tendré más tiempo de descanso?— Decías al mismo tiempo que despegabas un poco tú mirada del extenso trabajo mostrando un poquito de esperanza en que tú petición fuera cumplida.

—No—. Respondió firme ganándose una mirada enojada de tú parte antes de volver al trabajo de siempre, demasiado trabajo ese era tu problema siempre. —Pero. . .—

Antes de seguir la joven se levantó de su asiento y interrumpiendo a su jefe señaló la puerta y volvió a su trabajo dirigiéndose a una estantería con gran cantidad de papeles y archivos. —Si no es por eso entonces pido que se retire para que vuelva a mi trabajo—.

—Señorita _______— Llamó tu jefe mientras se acercaba a ti y te tendía una ayuda para alcanzar un archivo que estaba muy alto para ti. —Tenemos algo mejor que un simple descanso y es ésto—. Te tendió una pequeña campana al mismo tiempo que mostraba una pequeña sonrisa, una que se volvió una nerviosa al ver tu mirada fulminante.

Tomaste la campaña en tus manos y la dejaste en tu escritorio para luego voltear a dónde tu jefe cruzada de brazos y con una mirada entre enojada y sarcástica. —Primero, soy señorita Jackson para usted y segundo, ¿Una campana es mejor que “Un simple descanso”?—.

Tu mirada fulminante hizo que mínimo un escalofrío recorriera la espalda de tu superior, si no trabajará en ese lugar tal vez le tendría más miedo a la jovencita atareada, aunque no es por nada que esa actitud atareada y superior la hicieron tan importante y poderosa en esa fundación, si no fuera porque era más eficaz en contacto con los scp seguramente la hubieran hecho una de las cabezas de la fundación.

—No es una campana normal señorita Jackson, este scp es la solución a todos sus problemas, solo usarla con cuidado— Sin más se retiró de la oficina de la joven  atareada dejándola con una pequeña duda hacía esa pequeña campana.

En todos sus años trabajando en ese lugar había visto llegar a varios scp he incluso personalmente se había encargado de la investigación de varios, cada una de sus investigaciones estada buen archivada en sus estantes, estantes donde también se encontraba información sobre el personal, horarios, formas de contención, entrevistas y gran variedad de cosas que llegaban cada día para que ella se encargará de su archivado y investigación, aunque algunas veces salía de la rutina y ella misma era quien entrevistaba o hacia labores de campo, tenía gran cantidad de información y. . . No sabía que demonios hacía ese scp.

—Maldito Spencer, ni siquiera me dijo el número de éste scp— Murmuró molesta mientras se sentaba frente al escritorio observando esa campana con detenimiento. —¿Qué pasará si la hago sonar?— Las manos de la joven atareada se acercaron a la campana y con cuidado la sostuvo para posteriormente hacerla sonar obteniendo solo el sonido de una pequeña campana normal. —Maldita sea seguro es una puta broma—.

—Buenas tardes señorita Miller, ¿En qué puedo servirle?—. La aparición de una persona en tu oficina al igual que sus palabras la hacieron sobresaltarse un poco soltando un insulto en susurro al aire al igual que una mirada extrañada.

—¿Miller? Hace años no escuchaba a alguien utilizar ese apellido para llamarme—. Al analizar bien a la persona notaste como primero el traje típico de un mayordomo algo extraño estando en esa organización donde lo máximo que se veía era batas, uniformes naranjas y los trajes de los guardias y equipo de campo. —¿Quien eres?—.

—Usted puede llamarme Sr. Deeds, aunque creo que he recibido otro nombre estando en este lugar, scp 662—. Dijo de forma cortés acercándose un poco a la jovencita atareada quien parecía empezar a comprender.

—Ya veo, así que tú eres el scp que me dijo Spencer—. La chica se le quedó viendo un par de segundos de lejos antes de volver a su trabajo tomando unos papeles en sus manos. —No se cómo un mayordomo es mejor que un descanso—. Pensó en voz alta la jovencita volviendo a su trabajo de siempre sin darle más importancia al scp frente a ella se acercó a la estantería poniendo las hojas en su lugar batallando un poco con las que tenían que ir en un lugar alto. —Quien fuera que fuera el que me dió una estantería tan alta lo buscaré y lo voy a encerrar con 682—.

—Señorita Miller, por favor permítame ayudarle con su trabajo—. Dijo de forma cortés acercándose a tu posición y de forma rápida tomando los papeles de tus manos para acomodarlos en los lugares altos que te eran difíciles de alcanzar.

—Gracias. . . Oye, Sr. Deeds, ¿Me recuerda para que estaba aquí usted?— Agradeció y pregunto la joven atareada  sentándose en su silla giratoria observando al mayordomo acomodar los papeles.

—Para servirle en lo que deseé señorita Miller— Respondió aún sin dejar de acomodar los papeles de una forma elegante que se ganaba toda la atención de la joven investigadora, ¿Cómo alguien acomoda las cosas de forma tan elegante y perfecta? Pero aún más importante.

—¿Para servirme? ¿A mí?. . .Wow— La joven todavía no podía creerlo, un scp a toda su disposición. —Si es mejor que un descanso— Sin que la joven viera el mayordomo sonrió un poco por el comentario de está. —Sr. Deeds, ¿Podría ayudarme con el resto del trabajo? Por favor—.

—Seria un placer señorita Miller—. Respondió con afirmación el mayordomo terminando de acomodar los papeles.

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—Sigue así por favor. . . Ah, esto es el cielo— Decía con euforia la joven ya no atareada mientras sentía las manos de SU mayordomo pasar por sus hombros y espalda causando un sentimiento total de satisfacción.

—Me alegra que le guste señorita Miller— Decía el mayordomo favorito de la investigadora siguiendo con el masaje con una sonrisa al hacer feliz a la joven de la que a poco se estaba encariñando y tal vez enamorando.

—Solo llámame ______ y luego, ¿Podrías organizar los papeles por mí?—. Decía de forma linda y hasta cierta forma seductora la joven Miller que seguía disfrutando de las manos de SU mayordomo favorito.

—Seria todo un placer señorita _______— Respondió el mayordomo recibiendo una pequeña risa de parte de la jovencita no atareada, bueno, tal vez son los dos quienes se estaban encariñando mutuamente.