La Excelencia Da Asco (CDUS#2)

Rompemos amistades por vicio

En el libro Breve pero intenso os conté que mi mejor amiga era Emma, que nos conocíamos desde muy pequeñas, que eramos vecinas y que habíamos ido al colegio juntas... y toda esa perorata que os solté de niña pequeña. También os dejé caer que en 1°de ESO hubo discusiones entre Camila, Emma y yo. Bien, pues en este capítulo os voy a contar por qué discutimos ese año. Es algo que necesitáis saber para poder entender las nuevas discusiones de años posteriores.

Bueeeno nos situamos en el año 2014, 1°de ESO, mitad del curso... Sí, mas o menos. Emma y Camila últimamente pasaban mucho tiempo juntas y parecía que me dejaban algo de lado. Cuando había que ponerse por parejas en alguna actividad ellas se ponían juntas, también se solían sentar juntas en el autobús (y a mí me tocaba sentarme con Alex, pero bueno creo que a ella le daba igual, en esos tiempos yo no era tan insoportable como ahora y nuestra relación simbiótica se limitaba a simples saludos y a hablar de Memorias de Idhun). A mí me parecía muy extraño este comportamiento, sobretodo por parte de Emma porque se suponía que era mi mejor amiga. Así que un día recuerdo que vino Camila, con Emma a su lado, y me dijo muy apenada, como si supiera que iba a hacerme daño con lo que iba a decir:

- Abril, mira, es que Emma y yo somos ahora mejores amigas.

-Vale, me alegro mucho. Por fin sé lo que os pasa.

Mentira, no me alegraba para nada. La noticia me sentó como si me hubiera tragado un trozo de hielo. Y diréis: menuda tontería no? Ni que se fuera a acabar el mundo. Ya lo sé, pero mi mente de 13-14 años no lo comprendía, no daba para tanto. Os diría que se me pasó pronto la tontería pero me crecería la nariz como a pinocho. Ese tema dio para unos cuantos meses, pero bueno al final el enfado se me pasó y seguimos siendo amigas.

En 2°de ESO sucedió algo parecido, pero un poco a la inversa. Sí, aún seguíamos con la estupidez de quién era mejor amiga de quién. Yo me sentaba con Camila, y empezamos a hablar mucho y a hacernos más íntimas, dejando a Emma de lado, lo cual creo que en verdad le daba un poco igual porque ella iba a su bola, pasaba de nosotras (y normal que lo hiciera porque, echando la vista atrás, Camila y yo nos habíamos vuelto unas repelentes). Me acuerdo del día en que le dijimos a Emma que eramos mejores amigas, a lo que ella nos contestó:

- ¿Ah si? Que bien, me alegro. Oye, ¿me dejáis los ejercicios de mates? Es que no los he hecho.

A esta chica le daba igual!! Normal, ¿a quien iba a a importarle eso? Menos a Camila y a mí, claro. Emma pasó de nosotras, porque entendió que eso era una tontería. ¿Para qué tener una mejor amiga si podías disfrutar de cualquier amiga por igual? ¿Es que hay alguna que merezca un trato especial? ¿Hay amigas mejores que otras? No, en todo caso puedes tener amigas mas cercanas, pero que una persona sea "mejor" que otra... me parece un poco denigrante. Además, así te ahorras el sufrimiento (#dramaqueen) que pasé con este tema. La pena es que tardé en entenderlo.

Pasaron unos meses y nosotras dos empezamos a entablar una amistad mas sólida con Fabiola, una chica de Travesaño de los Reyes. Nos llevábamos las tres muy bien, pero todo se fastidió por varias razones, una de ellas fue que Fabiola dejó de caernos bien porque nos parecía que si tenía que decirte algo lo hacía a las espaldas, nunca de frente. Eso dio pie a muuuuuuuchas peleas, y nos lo tomábamos tan en serio que incluso afectó a nuestra perfectisimísima media del curso (es decir, nuestras notazas empezaron a ser notas comunes). Bueno, ya profundizaré más en ello en el siguiente capítulo, que por desgracia la cosa no acaba aquí y la historia tiene años.

Y bueno, de regalo para acabar el capítulo os dejo la lección de vida que aprendí, tarde, pero mejor tarde que nunca.
Moraleja: pasa de todo y de todos y te ira bien. Y si te cuesta hacer eso buscate a una persona que te de un guantazo a tiempo, que dicen que alivia la tontería. Os juro que este remedio casero funciona, que lo dicen las abuelas.