One Shots Animes

Nico/25 (Nanbaka)

Hoy me transferiría a Nanba, ahora me encontraba esposada en un helicóptero con dos guardias vigilándome. Por lo que he oído es una prisión solo de hombres, creo que los guardias no se han enterado de QUE NO SOY UN CHICO!! ;-;

Madre mía... 

La que me espera...

Bueno, al llegar me asignaron el número 1323 y me tatuaron el 23 en la parte derecha del cuello, donde mi sudadera, ya que hace frío, no tapa.

Un guardia calvo me guío hasta una puerta, al abrirla me doy cuenta de que es el despacho de la alcaidesa y ella está detrás de una mesa.

- Hola recluso 23...

- Reclusa.

- ¿Que?

- Reclusa. Soy chica. Continúa.

- ¿¡Desde cuándo eres chica!?

- Desde que nací. Soy chica biológicamente. Continúa.

- Bueno, ¿te gustaría ir a alguna celda en específico del ala 13? - dice confundida ya que le dijeron que vendría un hombre.

- ¿Hay celda 13? Así no me olvido, ala 13 celda 13 - le digo con una sonrisa.

- Vale, ahora llamo a Hajime.

- ¿El calvo de la cicatriz? - la veo emocionarse de manera adorable... Conque hay salseo... 7u7 interesante... ¡¡LOS SHIPEO!!

Luego entra en calvo y me pone unas esposas. Duramos como veinte minutos para llegar al ala 13 en un transporte raro. El calvo me lleva a otra oficina con otros dos guardias.

- Bueno, él es Seitarou, él Yamato y yo Hajime. Ahora te llevo a la celda 13 y te aviso de antemano que tendrás cuatro compañeros. No te dejes influenciar por ellos.

- ¿Cómo son? ¿Cómo se llaman? ¿Son divertidos? - y continuo haciendo preguntas mientras nos dirigimos a mi nueva celda - ¿De dónde son? ¿Hay alguno de España? ¿Sus crímenes son grabes? ¿Me harán daño? ¿Podré ser su amiga?

- ¿Amiga? - me mira raro.

- ¿Pasa algo?

- Querrás decir amigo. Tal vez te has equivocado de pala...

- ¡Soy chica! ¿¡Por qué todos creen que soy chico!?

- Nos dijeron que vendría un recluso, no una reclusa.

- ¿RECLUSA? - un chico de pelo rubio y rosa se asoma entre los barrotes, me suena de algo...

- ¿Como que reclusa? - seguidamente se asoma uno de pelo mayormente negro con dos mechones rojos.

- ¿He escuchado reclusa? - luego otro de pelo lila y rojo.

- ¿Hay una reclusa? - y por último uno de pelo verde.

- Sí, reclusa, y va a estar en vuestra celda. No le hagáis nada raro - Hajime los mira duramente y luego abre la puerta para que yo entre.

- Hola, soy la reclusa numero... - trato de ver mi numero, pero como está en el cuello no lo veo - Bueno, este - me punto el numero.

- El 23

- Pues eso, pero podéis llamarme ____. ¿Vosotros como os llamáis? - el de pelo rubio y rosa me suena demasiado... Aun que no sé de que... Piensa ____, piensa.

- ¿____? ¡Eres esa de la prisión de España! ¡La que me consiguió una cita con una amiga tuya! ¡Soy Uno!

- ¡¡Es verdad!! ¡Ya decía yo que me sonabas mucho! - digo feliz mientras lo apunto y me giro hacía los otros tres - Bueno, y los demás sois...

- Yo me llamo Nico- dice un peliverde.

- Yo soy Rock - dice otro.

- Y este de aquí Jyugo - Uno coge al pelinegro, que no tiene ninguna expresión, por los hombros.

   -   -   -   -   -   -   -   -   -   -   -

Pasaron semanas y se conocieron mejor, se escapaban los cinco juntos. Nico le enseñó el maravilloso mundo del anime, Rock la animaba a comer cosas que nunca antes había probado, Jyugo le enseñó a hacer un cubo de rubik y Uno le enseñó técnicas para apostar. Con el tiempo la chica se empezó a encariñar con el peliverde de forma algo diferente... De forma ¿romántica? 

Ella nunca había sentido algo así, y por lo visto Nico tampoco. Sus compañeros de celda ya sabían que era pero no les decían nada para que se dieran cuenta ellos solos... Cosa que al estar tan mensos no lo notaron y terminaron hablando con ellos.

- A ver, tú le gustas y él no lo sabe. Y tú le gustas y ella tampoco lo sabe. Fin - dice Jyugo con toda la tranquilidad del mundo. Nico y yo nos sonrojamos, después de todo ellos no saben lo que paso en la sala de juegos hace unos días...

///Flashback///

Estábamos sacando peluches de la máquina de gancho y cuando Nico saco un peluche idéntico a mi lo abrazó y empezó a llenar de besos.

- ¡¡¡Es precioso!!! - se había olvidado completamente de mi existencia hasta que meto otra moneda en la máquina de gancho y veo que se sonroja nivel tomate y deja de abrazarlo - Digo... Se parece a ti, es muy bonito ·-·

- No pasa nada, créeme que haré lo mismo con el tuyo cuando lo saque... - digo concentrada en sacar un peluche de Nico - ¡TOMA ESA! - agarro el peluche y cuando está fuera de la maquina lo abrazo con todo mi ser.

- ¿Por qué no me abrazas a mi? - dice bajito, aunque lo escucho y me sonrojo.

- ¿Y por qué tú no me das besitos? - digo tapándome la cara con el peluche.

Escucho unos pasos y acto seguido unos brazos que me rodean, al sentir el abrazo giro mi cabeza para mirarlo y nos besamos sin querer. Aunque era agradable, no como en otras prisiones en las que me besaban presos, o incluso guardias y me daban arcadas... Era diferente...

Así que cerré los ojos, disfrutando el momento. Al quedarnos sin aire nos separamos, pero volvernos a juntarnos casi por acto de reflejo. Aunque esta vez no era un beso tan inocente, en este hubo lengua.

- Que esto quede entre nosotros... - me dice Nico - ¿Quieres ser mi novia? - yo lo abrazo y chillo que obviamente sí - ¡Que alivio! - y me abraza aun más fuerte.

///Fin flashback///

- Estoo.. - yo me rasco la mejilla mirando a la derecha y Nico con una mano detrás de la cabeza mira el techo.

- Un momento... ¿Ya lo sabíais? - nosotros comenzamos a negarlo de forma tan exagerada que se notaba a kilómetros que mentíamos

- ¿Y desde cuando lo sabéis? - nos pregunta Rock serio - Yo apostaba un plato de macarrones a que no lo sabíais... - yo suspiro y miro a Nico, él asiente y nos tomamos de las manos.                 

- Hace unos días comenzamos a salir. No voy a dar más detalles - digo y les saco la lengua.

- Nicooo - le suplican, pero él se niega.

- Ya sabéis lo justo y necesario - dice sonrojándose.