Me despierto debido al calor que siento y al abrir los ojos recuerdo que estoy con Harry. El me abraza por la cintura aún dormido y su respiración queda en mi oreja. Por un momento pienso en lo reconfortante que estar así con el, me siento bien al tenerlo conmigo y todo lo que ha hecho por mi en estos dos días.
Me doy la vuelta con cuidado de no despertarlo y poder quedar cara a cara; verlo así me hace recordar muchas cosas. Sus labios ligeramente partidos a la mitad, sus largas pestañas, todo esto parece como si hubiéramos viajado al pasado. Me tomo la libertad de enroscar mis dedos en sus rizos que ahora están más largos, tal vez necesita un corte pero me gusta su cabello de esta forma. Cierro mis ojos, juntando mi frente con la de el y comienzo a llorar en silencio.
Lo amo mucho, pero esto está yendo demasiado rápido, me abruma no saber como actuar con el nuevo Harry. No puedo dejar de pensar en que le diré a mí mamá sobre el. Mamá, Harry y yo nos volvimos a encontrar hace dos días y me he quedado a dormir con el pero no te preocupes, el solo me abandono e hirió mi corazón. Descuida, ya lo hemos dejado en el pasado. Que patética soy. Mí mamá me odiaría si le digo algo así. No solo ella, todo el mundo. Suena loco como quiero estar con el pero también lo quiero lejos, y no porque no lo ame sino porque creo que no estaba preparada para su regreso. Tal vez todavía no lo estoy.
Alejo mi rostro y con sutileza me levanto de la cama para poder ponerme mi ropa de ayer e irme, no sé de dónde salió mi valentía de ayer para pedirle a Harry que durmiera conmigo pero ahora mismo soy una cobarde huyendo de esta situación.
Entro al baño y veo mis prendas secas en donde las colgué ayer en la noche, me despojo de la ropa de Harry y una vez desnuda su aroma me hace falta. Arreglo mi cabello en el espejo cuando termino de vestirme y me apresuro por salir de esta habitación de hotel.
- ¿Ya te vas? - escucho la voz decaída de Harry al dar un paso fuera del baño.
Me quedo sin palabras, me ha atrapado como la niña cobarde que soy.
- Y- yo
- ¿Qué fue lo que hice mal? - me pregunta cabizbajo sentado en el borde de la cama. Me quedo callada sin saber que decirle. - ¿Te estas yendo por mi o porque de repente la cobardía te ha ganado? - su voz es fría y su cuerpo se endurece.
Me siento molesta por sus palabras pero no puedo reclamarle porque tiene razón.
- Harry, esto esta mal. - le respondo en un hilo de voz.
- ¿Mal? - habla mas fuerte, esta enojado y de un salto se pone de pie. - ¿Esta mal que quiera tenerte a mi lado de nuevo? Bee, deja de actuar como una niña indecisa.
- Harry, lo siento.
- Pensé que de verdad me habías perdonado, ¿Crees que no pienso en todo el daño que te hice? Eso no me lo podré perdonar nunca. Pero por favor, deja de jugar conmigo y con lo que siento.
- ¿Y yo tengo que perdonarte? Tu también jugaste conmigo o por lo menos eso me haces pensar - inquiero enfurecida.
Su mirada fría se queda en mi por un momento.
- No sé qué más decirte para demostrarte que estoy arrepentido. Tienes razón, no tienes que perdonarme. Y yo no quiero presionarte mas, vete si eso es lo que quieres. - Harry se da la vuelta rendido, dándome la espalda se acerca al ventanal de la habitación y su mirada se pierde en el paisaje.
Mis ojos pican y me siento mal. Todo lo que acaba de pasar es horrible, saber que esto termino es fatal.
- Ha-Harry, - trato de llamar su atención. - Lo siento.
Su mirada baja a sus pies y yo me marcho destrozada.
Cierro la puerta detrás de mi y me deslizo por esta hasta llegar al suelo. No hay nadie por el pasillo, checo la hora en mi reloj y apenas son las ocho. Me permito llorar ahora que el ya no me ve y con las pocas ganas que tengo me pongo de pie para ir al elevador.
Entro en el y presionó el botón del lobby.
Lo arruine, fui yo la que tiene la culpa de que esto haya pasado. Harry tiene razón soy una niña indecisa jugando con mis sentimientos y los suyos. ¿Si ya sé lo que quiero para que me resisto a tenerlo?
Mis pensamientos se esfuman de mi mente cuando recibo una llamada de Camila.
- ¿En dónde rayos estas? - me pregunta angustiada.
- Realmente no quiero responder esa pregunta. - digo sin ánimos.
- Estoy preocupada por ti, dime donde estas si quieres voy por ti.
El elevador para pero no en el piso a donde me dirijo, las puertas se abren y una pareja entra. Ambos me saludan feliz y yo les respondo con una sonrisa.
- Bee, ¿Me estas escuchando?
La chica que viene tomada de la mano del hombre que es un poco más alto que ella, le da un beso en la mejilla y este le regresa un beso en los labios. Seguidamente el la abraza y se funden en su propia atmósfera.
Diablos.
- ¿Bee? Rayos, contesta, se que sigues ahí.
- Lo siento Camila, te llamaré después.
Dicho esto, cuelgo y guardo mi celular en mi bolso. Me acerco a los botones del elevador y presionó el piso de la habitación de Harry. Me quedo ansiosa esperando hasta llegar a mi destino, la pareja que me acompañaba sale del elevador y noto que solo hace falta un piso para llegar con Harry. Cuando las puertas se abren me apresuro a llegar a su habitación, al estar enfrente de su puerta toco sin dudar, tengo que dejar de ser una niña insegura e indecisa y ser alguien fiel.
Escucho pasos acercarse y cuando la puerta finalmente se abre ve a Harry con los ojos rojos y sorprendido por verme aquí.
- ¿Qué haces aquí? - me pregunta.
Me acerco a el y lo beso. Harry se queda inmóvil por unos segundos pero cuando mis manos llegan a su nuca el mueve sus labios al ritmo de los míos. Me separo de el con una sonrisa melancólica.
- Lo siento, pero no te podía dejar.
Mi mirada se conecta con la de Harry y el sonríe. Me toma por la cintura y me eleva dejándome en su cama.
- Pensé que ya no volverías. - Susurra acostándose encima de mi pero sosteniendo su peso con sus brazos.
- Yo igual lo pensé.
- ¿Por qué regresaste?
- No quiero perderme la oportunidad de tenerte de nuevo conmigo, estuvimos separados un año y por arte de magia nos volvimos a encontrar. Tu estuviste buscando por mi y yo te estuve esperando, esto no es una coincidencia Harry, tampoco diré que es el destino. Es algo más fuerte. - sonrío.
- Amor, tal vez - ríe.
- Si, amor tal vez. - río junto a el.
- Tienes que prometerme que nunca más volverás a hacer eso. No quiero dejarte ir otra vez.
- Te lo prometo. - mis manos toman sus brazos y lo acaricio.
- Esto parece un sueño, ¿Sabes?
- Lo sé, ahora bésame por favor. - le pido.
Harry no titubea y enseguida se hace cargo de devorar mis labios.
Estoy completamente segura que después de esto, nada ni nadie podrá separarnos de nuevo.
Y se siente bien.
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Dark Paradise//Book #2//Wattys2015
FanficHa pasado un año desde que Harry dejó a Bee el día de su exposición de arte; ella es más fuerte ahora, nada la afecta, nada la vuelve débil, nada la tiene vulnerable y nada la derrota. Excepto el.