VAMPIRE LOVE

CAPITULO 19

Dedicado a mac1826 gracias por tus comentarios, en verdad me encantan ♥️

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Con la sábana se cubrió, trató de ponerse de pie, pero le dolía mucho el tobillo.

-Uhg- se quejó- Duele- caminó hasta la puerta y salió de la habitación.

Miraba todo a su alrededor, algunas cosas estaban cubiertas por telas blancas.

-Emm...-Trataba de recordar el nombre de ese tipo- ¿Levi?- Preguntó dudoso.

-¿Si?- respondió a lo lejos-¿Te levantaste?-

-...- frunció el ceño, se acercó por dónde vino la voz-¿Dónde está mi ropa?-

-Caiste al piso, mocoso- estaba sentado en el sofá, bebía té negro de una taza- la tuve que lavar, por lo asquerosa que estaba-

-Y... ¿No tienes más ropa?- ladeó su cabeza- necesito algo para poder vestirme-

-No te preocupes, te ves bien así-lo miró- oye- frunció el ceño- no arrastres la sábana, se va a ensuciar-

-¿Y? Seguro la vas a lavar igual que mi ropa, pervertido-

-Tsk- se puso de pie, dejó la taza sobre la mesita de centro y se acercó al castaño- No soy pervertido-

-¿No? Yo creo que sí lo eres-

-Bueno, tú dijiste esa vez que querías pagarme con algo...- sonrío levemente- quizá me pagaste con eso- le susurro.

-¡Aaah!- se sonrojó- E-eres pervertido, un pervertido psicópata- lo apuntó-¡¿Cómo es que por casualidad llegaste dos veces a mi?!-

-Bueno, suelo viajar bastante por la carretera, ¿Sabes? Sólo fue coincidencia-

-¡No!- negó con su cabeza- seguramente me secuestraste- susurró- pensé que eso sólo sucedía en la ciudad, ¡Pero aquí también!¡Voy a llamar al Sheriff!-

-Llamalo si quieres- se alejó- Que problematico eres, mocoso-

-¡Eren!¡Me llamo Eren!¡Mocoso tu abuela!-

-¡Tsk!- frotó su sien- Ahhh... Está bien, te daré tus cosas y te irás-

-¡Si!¡Eso haré!-

El azabache llegó con su ropa y sus pertenencias. Se vistió rápidamente, la ropa estaba algo húmeda.

Caminó hacia la puerta principal y la abrió.

Una ráfaga de viento lo hizo cerrarla de inmediato.

-¿Dónde....estamos?- pestañeo varias veces- Uhh...- sobó sus brazos, sentía mucho frío.

-En la falda del monte- se acercó por atrás- bueno, ya puedes irte- abrió la puerta y lo empujó.

-¡Aahh!- gritó por el frío que sentía-¡No!-

-Tu dijiste que querías irte- decía desde el interior de la casa- vete...-

-Nnhg...- miró hacia al frente.

La carretera se veía muy pequeña desde ese lugar.

-P-pero... Estamos muy lejos-

-Si- cruzó sus brazos- trabajo de noche y por eso te decía que podría dejarte cerca-

-Nnh...- se abrazó a si mismo.

-Puedes quedarte, hasta que anochezca-

-¿Hasta que anochezca?- lo miró.

-Si, no voy a perder mi tiempo en ir a dejarte ahora-

-Haa- suspiró- está bien- regresó con el azabache.

-...- cerró la puerta- no abras las cortinas, no quiero que hagas ruido. Tengo que descansar, ayer perdí mi tiempo al salvarte y me tratas como la mierda-

-No fue mi intención, sólo que soy algo desconfiado con los demás, sobre todo con alguien que por casualidad me ha salvado dos veces. ¿No crees que es extraño?-

-Quizas lo sea, mocoso. Pero deberías ser más agradecido- le daba la espalda.

-Si, lo lamento- jugaba con sus manos, por lo nervioso que estaba.

-Bien, si quieres comer... Puedes hacerte algo- apuntó hacia una dirección.

-Emm... Si- asintió- Gracias- se alejó.

-...- lo vio cruzar la puerta y soltó un bufido- Nhg- un poco de saliva cayó de su boca- Maldito humano, su sangre huele delicioso... - frunció el ceño- y ya tengo hambre-

Sus garras estaban creciendo, al igual que sus colmillos, sus ojos se volvieron rojos.

Trataba de controlar su hambre.

-No puedo...- fue hacia la habitación y la cerró con seguro- a Kenny no le gustaría que comiera solo... Kenny lo quiere para la luna roja- sonrío- je... Ese día probaré su sangre...- lamió sus labios.

Caminó hacia el armario de la habitación y la abrió.

Una hermosa joven estaba amarrada, lloraba y trataba de gritar, pero la mordaza se lo impedía.

-Me bastará contigo, humana...-la tomó del cuello y la elevó- ¿Que pasa?¿Tienes miedo?-

-¡Mmmh!-Lloraba.

-No te preocupes...- la miró directo a los ojos.

La joven se calmó, sentía atracción a ese desconocido.

La acercó a su cuerpo, con su mano corrió el largo cabello tono chocolate.

-Tranquila- le quitó la mordaza.

-Por favor...- susurró.

-Si, no te preocupes...- acercó su rostro y le besó- Beberé cada gota de sangre...-

Sus colmillos crecieron, la agarró fuerte con sus garras, cortando la delicada piel.

Mordió con fuerza, ella ni siquiera pudo gritar.

-Nhg...- Mordía más fuerte.

La empujó y el cuerpo de la joven cayó al piso.

-Haa....- lamió el hilillo de sangre que caía por la comisura de sus labios- delicioso-susurro para si mismo.

Aquella bestia, no tenía piedad por nadie.