Capítulo 3

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Narra Jimin:

Una vez en el auto del mayor, nos dirigimos a su casa envueltos en un completo silencio, que solo era roto por el sonido del vehículo y algunas voces que se oían en las calles.

Mi vista estaba fija en la ventanilla, admirando los árboles, casas, tiendas y edificios pasar. Sonreí al ver a un niño llevar de la correa a su perro. Un suspiro brotó de mis labios.

- ¿Bebé?. – Salí de mi ensoñación y observé al mayor. – Te preguntaba si querías comprar algo dulce en la tienda. – Su rostro estaba serio y su mirada fija en la carretera, pero su voz salió suave y tranquila.

- N-no es nec-cesario Hyung... - Hablé bajo y el otro asintió.

Al llegar a nuestro destino, y luego de dejar nuestras cosas en el sofá de la sala. Caminamos hacia la habitación del mayor. Me senté al borde de la cama, mientras Hyung buscaba ropa en su armario.

- ¿P-podemos hablar d-de lo que pasó?.

- Ten, ponte esto. Yo me cambiaré en el baño y haré algo de comer. – Me entregó la ropa y dejó un casto beso en mi frente.

- P-pero... - No me dejó terminar y salió de la habitación. Suspiré y comencé a cambiarme. Me coloqué frente al espejo, observando mi reflejo. Hyung me dio una remera algo grande, junto a unas bermudas bastante cómodas.

Tomé mi uniforme y salí del cuarto, dirigiéndome hacia la sala. Guardé en mi mochila la ropa, y saqué los útiles de ésta, para luego comenzar a realizar mi tarea sobre la pequeña mesa de centro que había.

El sonido de mi bolígrafo al pasar por las hojas, se complementaba con el leve ruido de cosas moviéndose con delicadeza en la cocina. Sonreí al pensar que siempre era así, me gustaba la tranquilidad que había...me gustaba estar con Hyung...

Narra Yoongi:

Con calma, serví el té en el par de tasas sobre la mesada. Las sujeté con cuidado y caminé hasta la sala, dejando una frente al menor.

- Si tienes alguna duda dime ¿de acuerdo?. – El otro asintió y me senté frente al él, para luego comenzar a revisar un par de documentos.

Flashback:

- Espero que no lo tome a mal profesor, pero sería recomendable que no asistiera a la reunión de hoy. – Me habló aquel hombre de edad avanzada.

- N-no se preocupe... - Hablé bajo.

- Quiero evitarle cualquier tipo de "problemas" ¿de acuerdo?. – Asentí. – Aquí está una copia de los documentos que se entregarán hoy. Como se harán algunas remodelaciones en el edificio, se llevaron a cabo leves cambios con respecto al horario de algunas materias. – Leí a penas los papeles, notando que tendría un poco de tiempo extra en mi descanso. - Por cierto, en la reunión ingresarán nuevos profesores y creo tener a la candidata perfecta para ayudarle en sus clases. – Sonreí leve al escucharlo, últimamente se me estaba complicando realizar tanto papeleo entre los talleres y las clases. – Solo necesitaría que usted la guiara con el temario y demás.

- De acuerdo.

- Espero que no sea una molestia profesor.

- No se preocupe, no tengo ningún problema con ayudarle...

Fin del flashback

Solté un suave suspiro y guardé los papeles. Mi vista calló en el menor frente a mí e inevitablemente sonreí. Sus ojitos estaban fijos en su libro, y cada tanto hacía algunas anotaciones. Su ceño estaba levemente fruncido y un pequeño puchero adornaba sus esponjosos labios. Sin resistirlo me levanté y rodeé la mesa, para luego colocarme a su lado y dejar un casto beso en la punta de su nariz.

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