009 ━━ will byers.

-Chatper Teen-

—Si hayamos la fuerte, quizá podemos detenerlo. O impedir que se propague o haga lo que con los químicos. —Concluyó Nancy—.

—¿Como lo encontramos? —pregunto Once—.

—La señora Driscoll. —Dijimos Will y yo—.

—Si tanto desea volver...

—¿porque no la dejamos? —terminé—.

[...]

—Vine a visitar a mi abuela otra vez... —Se escudo Nancy a las preguntas de la vieja enfermera—. Ellos son mi familia.

—Extendida. —Confirmó Kendall—.

—No me importa quieres son. —Habló la vieja—. Conoces las reglas. De a dos personas.

—Si, pero...

—¡D-O-S! —Siguió hablando por teléfono— Esta niña perdió la cabeza, trae un zoológico entero.

Nancy y Jonathan se decidieron por entrar mientras nosotros nos quedábamos esperando afuera.

Lucas y Kendall estaban con Mike, intentando que salga un dulce, pero esa máquina no servía.

—¡Vamos, pedazo de chatarra! —Gritó el de pecas—.

Mire a Once, sin que se dieran mucha cuenta agarré la energía de una lámpara de mesa y le di una pequeña descarga eléctrica, mientras Once lo batió para que salieran todos.

Los Chicos nos miraron y disimuladamente me quite la sangre de la nariz. Ce no disimulo nada.

—Gracias. —Dijo Mike—.

Vi como los tres empezaron a hablar, ya sabía a donde iba todo. Me aleje de las chicas y me senté junto a Will.

—No te pregunte pero... ¿ya tienes energías? —Preguntó mirándome—.

—No, siento que en cualquier momento voy a caer, necesito electricidad, literalmente. —Nos reímos—.

—Oye... ¿te puedo preguntar algo?

—Claro, dime. —Me senté de tal manera que quedáramos frente a frente—.

—Se que no es el mejor lugar, ni el momento pero... ¿Q-que somos? —Pregunto tartamudeando—.

—¿Que quieres que seamos? —Pregunté—.

—N-no... no se...

—¿Me quieres? —Pregunté otra vez yo—.

—O-obvio, Sam. Eso no se pregunta.

—Pero ¿como amigos?

—...

—¿Will?

—no... me gustas. Y la verdad es que...

No deje que terminara, simplemente lo besé. El correspondió abrazándome por la cintura. Pero, como siempre, algo pasó. Las luces comenzaron a parpadear.

Nos separamos sin dejar de abrazarnos y miramos estas. Will apretó su agarré y toco su nuca.

—¿Esta aquí? —pregunté con miedo, a lo que el asintió—.

Eleve me mano rápidamente y tomé la electricidad, sentí un ardor en mis ojos, seguramente estaban cambiando de dolor.

—¡De a dos!

Sin importar los gritos de la enfermera entramos. Sentía nuevamente esa presión en mi, pero era más fuerte. Pare de golpe y los chicos me miraron.
Mi respiración se agito y sin pensarlo dos veces comencé a correr. Tomaba toda la electricidad necesaria. Sin parar baje las escaleras y me acerqué al ruido.