Ever since New York: Hinata vuelve a llorar por sus recuerdos.

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Anonadado, así se sentía Hinata después de esa llamada. Las palabras tienen peso, Hinata era tan frágil que una simple sílaba podría fragmentar un trozo de su ser, pero Atsumu lograba destrozarlo entero. Y tras dos años apenas lograba juntar las piezas destrozadas para que el muchacho llegue a volverlas a esparcir.

—Shoyo… ¿estas bien? —Kageyama estaba preocupado ya que el rostro ajeno había perdido todo rastro de color. —Shoyo…

—¿Eh? ¿Seguís acá? —Hinata había bloqueado por completo su alrededor y la existencia de otra persona que no sea Atsumu.

—Prácticamente me invitaste a quedarme. ¿Estás bien?

—¿Te molestaria irte? Prometo invitarte otro dia.

Hinata ni siquiera se molestó en despedir al joven al que acababa de rechazarle un beso.

Hinata ni siquiera se molestó en despedir al joven al que acababa de rechazarle un beso

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Se había ilusionado, Hinata no podía mentirse respecto a eso. Atsumu parecía decidido esa noche, que él deje a Kiyoko lucia real, la probabilidad de que ese chico se vuelva su novio estaba latente. Un novio, su primer novio. Hinata se estaba permitiendo imaginar cómo sería no estar del lado del amante, como sería que la gente los vea de la mano o al menos los vean.

—Vamos Kenma, alégrate por mí.

—No lo sé Shoyo, es raro. Llevan medio año viéndose a escondidas y ahora se le ocurre dejar a la novia.

—Ahora está seguro que me quiere.

—¿Y lo demás que fue? ¿Sexo sin sentimiento? Solo no te hagas ilusiones al respecto.

—Shoyo, estoy del lado de Kenma es esta. —comentó Yamaguchi que estaba concentrado en las pizzas que en la conversación. —No creo que vaya a dejar a la novia, no mostró interés en hacerlo hasta ahora.

—Diganme algo bueno al menos, no pisoteen mi alegría.

—Puedo presentarte a alguien. —dijo Kenma.

—El sexo es bueno. —fue el argumento de Kenma.

—Los odio.

Hinata fue salvado por la campana, el sonido del timbre le permitió correr lejos de sus amigos que pensaban seguir destrozando sus ambiciones de relación estable. Detrás de la puerta Atsumu lo esperaba recostado contra la pared, Shoyo optó por salir y cerrar la puerta a sus espaldas para que Kenma y Yamaguchi no maten a “su chico”.

—¿Estás con otro que no me invitas a pasar?

—Estoy teniendo un trío salvaje, involucra pizzas, películas del Studio Ghibli y mis dos amigos.

—¿Todavía me odian?

—Creo que planean matarte, dormiría con un ojo abierto. Pero por ahora me interesaria saber qué haces acá, estabas de viaje… —Hinata alzó una ceja.

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