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Antes se tomaban las manos todo el tiempo, luego, vivían prácticamente abrazados.

Para dormir, HueningKai se acomodaba en el hombro de SooBin, una mano rodeaba la cintura del mayor, quien quedaba un poco más arriba, con sus labios sobre la frente del pelinegro, perfecto para dejar besos de buenas noches, y lo envolvía con su cuerpo, pasando un brazo cerca de su hombro, muchas veces, sus piernas también se enredaban y se entrelazaban, haciendo que fuera dificil ser separados, o así lo sentian.

Hablaban en susurros bajos, creyendo que así, eran los únicos que podían escucharlos, aunque nada las daba esa certeza.

─ SooBin. Luego de lo que pasó. No había nada de agua ─ murmuró HueningKai ─ Desapareció toda, sin más. Como si no hubiera pasado nada.
Como si no existiera

─ HueningKai, casi mueres... Y eso sí existió.

─ P-Pero fue por otra cosa. Yo. Aguanté la respiración hasta que creí desmayarme. Me rendí, y sólo me dejé llevar. Y después estaba en tus brazos...

─ Y después no pudiste respirar.

─ No estaba respirando bien desde antes.. El pánico me asfixia.

─ Lo sé, Ning Ning.

─ Pero, cuando estaba en agua, y ya me había rendido, creo que por un segundo pude respirar. Debajo del agua, ¿Entiendes?

SooBin guardó silencio, bajo la vista a sus ojos, brillantes y algo amargos de HueningKai, estaban así desde lo ocurrido.

─ ¿Como cuando sueñas que estás debajo del agua? ─ murmuró.─ Esto no parece ser otra dimensión, esto no parece real, es como un sueño, que no controlamos. Creo.

─ Tus teorias se han vuelto fascinantes, HueningKai ─ dijo el mayor con una sonrisa ─ Es posible, quizás no tanto como un sueño, quizás es otra cosa.

─ Significa que esto no es real. Y eso me lleva a pensar, ¿Qué tal si uno de los dos no es real?

SooBin frunció el ceño.

─ Si pudieron crear y controlar todo esto.. ¿Y si uno no es real? Deberían poder crear como un personaje.─ sus ojos se llenaron de lágrimas

─ ¿Y si me enamoré de alguien que no existe? ─ pregunto, ladeando su cabeza.

─ Yo existo, HueningKai... O eso creo, pero de cualquier forma, también estoy enamorado de ti ─ dijo, limpió sus lágrimas, los gruesos labios del menor se curvaron un poco, en una sonrisa.

─ ¿Y si soy yo quien no existe?

SooBin no tuvo nada para decir, los ojos del menor se notan perdidos, algo rotos y no con las mismas esperanzas con la que los había conocido.

Se inclinó hacia él y junto sus labios de nuevo, en un amargo beso.

lovely  |  sookaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora