La noche había pasado y como era de esperarse muchos aprovecharon el primer día para idear algún plan antes de ir a por un pergamino, desde muy temprano muchos ya se habían puesto en marcha con la adrenalina recorriendo sus cuerpos, cansados de esperar, los hermanos optaron por enfrentarse al primer equipo que se encontrarán. No mucho tiempo después encontraron a uno, los oponentes eran claramente mayores que ellos, más permanecían indiferente ante estos, estaban a varios metros de distancia viéndose fijamente, era claro que un combate se desarrollaría en aquel lugar. El peli-rojo mantenía la mirada fija en ellos con los brazos cruzados, a sus lados se encontraban los dos mayores manteniandose en silencio.
—¿Que se creen? —habló un chico lejos del lugar, junto a su equipo se encontraba escondido entre los arbustos observando —ellos están muy pequeños para enfrentar en conbate a oponentes tan grandes.
El canino que se encontraba en su abrigo comenzó a temblar y jadear del miedo que le producían aquellas presencias, el joven dueño exclamó con sorpresa y frunció más el seño.
—¿Q-que? ¿Que te dijo akamaru?
—Que el gran dote, está en serios problemas.
La chica miró con sierto temor al frente, ninguno se había movido de su lugar ocasionando más tensión en el ambiente.
—Muy mal niños —pronunció uno con varias sicatrices y vendas —Debieron escoger mejor a sus oponentes, ahora todos van a morir.
—Ya e oído bastante de ti, agamos esto rápido, no quiero perder mi tiempo contigo.
La mirada del peli-rojo seguía siendo penetrante y aterradora para muchos, incluyendo a sus hermanos al igual que su vos fría y sin emoción, su hermano mayor miraba de reojo al peli-rojo, eran claras sus dudas sobre si sus oponentes tenían el pergamino que necesitaban.
—Oye Gaara, ¿no se te aria más lógico primero seguir a estos mugrosos y obtener información? Digo, si tienen el mismo tipo de pergamino que nosotros estaríamos teniendo una pelea innecesaria.
—No me importa... —Una pequeña exclamacion de sorpresa por parte de un miembro del otro equipo se iso presente —Ellos me vieron feo, a si que todos morirán.
La sed de sangre se asía presente en los ojos del peli-rojo, pero no era tan intensa como en otras ocasiones, aun a si produjo un sentimiento de terror del equipo contrario y los que los observaban, su hermano frunció un poco el seño lamentando tener que aguantar ese tipo de cosas por parte del peli-rojo.
—Agh, si crees que puedes matarnos —llevo sus manos a los palos que sobresalían de su espalda tomándolos y jalandolos asía enfrente —inténtalo —frente a él aparesieron algunas sombrillas, aunque se mostrará molesto era evidente que el miedo seguía cresiendo dentro de él. Lanzó las sombrillas al cielo alertando al hermano mayor y asiendo que retricediera un poco —Ahora —puso sus manos en posición para comenzar con un genjutsu —¡arte ninja:tormenta senbun!
Agujas comenzaron a rodear las sombrillas mientras giraban rápidamente, algunos paresian asombrados más el peli-rojo siguió con una mirada neutra incapaz de demostrar algo claramente. Tras un pequeño grito las agujas comenzaron a rodear a los hermanos, ante esto el peli-rojo sólo parpadeo lentamente manteniendose todavía clamado.
—Arriba abajo, izquierda derecha, no importa a donde vayas, puedo atraparte, no ahí punto siego en este jutsu y es mortalmente sertero.
Las agujas comenzaron a dispararse en dirección al peli-rojo levantando una nuve de polvo mientras esté no iso nada por moverse o evitar el ataque, una sonrisa de satisfacción se dibujo en el atacante mientras el humo se dispersaba para dejarle ver cuán trabajo habían echos sus agujas, más esta desapareció al contemplar como el peli-rojo no sólo había terminado ileso en el mismo lugar y en la misma posición, si no que también una especie de caparazón de arena lo protejia con las agujas enterradas en este.
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Infantil. //Gaara y tu//
Fanfiction-Al principio no sabía por qué me quedé... Incluso cuando gritaba tu nombre y te apoyaba no sabía el por qué. Sonrió la chica viendo al cielo, el peli-rojo la observaba en silencio, admirando cada parte de su rostros, desde su largas pestañas hasta...