Letras de un culpable #2© [✓]

IV. P

“¿A caso es posible ser feliz aunque sea por un solo instante?”

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TEMOR

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San Francisco
20 de Diciembre
00:00 a.m

Ella lo miró de reojo. Las lágrimas empezaron a asomarse peligrosamente, pero las contuvo como pudo.

La gente caminaba de aquí para allá, el frío no había cesado, y la brisa fresca se colaba entre la ropa provocando ligeros escalofríos. 

—¿Quién? —preguntó As en un susurro. Su mirada se habia tornado oscura, glacial y con una pizca de odio—. ¡¿Quién?! —volvió a preguntar gritando.

En el interior del joven empezó a nacer un sentimiento amargo. Temblaba, ya no sabía si era por la ira que le inundaba o por el puro hecho de que estaba pasando frío. Tenía ganas de pegar al que le había causado daño a esa pobre chica que ahora tenía los ojos cerrados con el rostro en dirección al oscuro firmamento.

—¿Por qué le proteges? —preguntó él.

—No le protejo a él sino a tí, mi hermano no es cualquiera, es un puto psicópata, un loco, es alguien que controla todo y a todos, y no quieria que te involucraras en esto —gritó—. Hay gente ayudándome, gente que intenta hacer algo, y no quiero que te ocurra nada, ahora mismo estar conmigo puede ser peligroso, estás en su punto de mira y no dejará de hacer locuras hasta que vuelva a casa. Porqué lo que siempre ha querido es amargarme la vida y destrozarmela. Cuando crees que por fin todo cambiará ya puedes empezar a temblar, porque es cuando te das cuenta de que nada podrá parar lo que siempre te ha estado atormentando. 

El silencio volvió. Las respiraciones eran lentas, los pensamientos lejanos y las memorias cada vez se iban alejando más dejando minusculos trozos de una chica que actualmente es de cristal.

Él se acercó a ella y por un impulso de locura la abrazó. Era un abrazo dulce, delicado que transmitia calidez y paz. Ella se quedó en shock durante unos minutos pero acabó correspondiendo a su abrazo.  El sentimiento que empezó a apoderarse del cuerpo de la joven era desconocido para ella, era maravilloso. 

—Lo siento, enserio que lo siento, si yo hubiera tenido tú vida me hubiera ido antes, supongo que no soy tan fuerte como tú, porque escúchame, eres increíble, eres simpática, eres fuerte y eres maravillosa como una estrella que emana una dulce luz.

—Gracias, por todo —y en ese micro instante, sintió un sentimiento que siempre se ausentó en su interior, un sentimiento, llamado felicidad.

—¿Entramos? —preguntó él separándose y entregándole las gafas.

Ella se las volvió a colocar y emprendieron su camino hacía la entrada de la biblioteca.

Entraron por esa enorme puerta y accedieron a aquel increíble recinto lleno de libros.

—Esta es mi guarida secreta, solo cuando era más pequeña venía aquí, cuando mi abuela murió ya no me atreví por miedo a que me hiciera daño —dijo mientras cogía un libro de entre toda esa enorme selección de la estantería—. Gracias.

—¿Por qué?

—Por no irte, por no alejarte de mí, ninguna persona con miedo se quedaría a mi lado.

—En un solo instante —susurró él leyendo el título del libro que tenía Rain entre las manos—. Jamás me alejaría de tí, aunque hubieras cometido y vayas a cometer el pecado más grande de la historia seguiré a tu lado, puede que muchas veces te hayas dicho a ti misma que tienes que seguir viviendo, que la vida puede cambiar en un solo instante. Se que la esperanza aún no ha cesado de tu interior, solo que esta escondida en algún lugar de tu corazón y solo tienes que encontrarla, se que crees que ya no vale la pena seguir luchando por esta vida, pero... ¿Y si vale la pena? 

—Siempre pienso antes de hacer alguna locura, el día en que me encontraste tenías razón, realmente no quería morir,  pero a veces el miedo gana a la razón. Estar conmigo es como estar en el medio de un gran huracán, mi mundo ya se ha roto, ya se ha desmoronado y ya nada podría volverlo a reconstruir, puede que no quiera morir pero no sabes las veces que he pensado en, ¿Y si no hubiera nacido? Puede que estuviera en otro cuerpo, puede que tuviera otra vida, una vida mejor, no lo sé.

Él se quedó en silencio, reflexionando con las últimas palabras dichas.

¿Que habría ocurrido si él no hubiera nacido? ¿Acaso habría sido una gran diferencia?

Esas, eran ese tipo de preguntas que eran desconocidas y sin ningún tipo de respuesta.

As empezó a observar a Rain como ojeaba las hojas de los libros, aún sentía rabia por lo que le habían hecho, sentía odio hacia sí mismo por la impotencia que le daba no poder hacer nada y sentía tristeza por no poder ayudarla más.

No quería rendirse delante del reto que se habia propuesto, había prometido no hacer nada si al final de esos cinco dias ella seguía queriendo desaparecer, no iba a romper su promesa, pero ya tenia un nuevo objetivo.

Que ella, no muriera. 

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¡Hola bellezas del mundo!

¿Como se encuentran?

Jaja ojalá estén bien.

Wey es increíble pero luego de otro medio año ahora más corto conseguí traeros este cuarto capítulo 😱

¿Creen que As conseguirá su objetivo?

Jjaa ya solo quedan cuatro capítulos 💜

Canción: safe inside — james arthur

En fin beshitos enormes 💜🌸