Loki - La Profecía Del Infinito

¿Quién es Lin?

- Por fin te despertaste, he estado pesando si sería más difícil conseguir las otras joyas contigo muerto. - Stephen habló cuando se acercó lo suficiente para ver que su pareja estaba tratando de levantarse de la cama.

- Cállate. - Se quejó malhumorado. - Envíame a Wakanda, rápido, necesito ver Lin. - Tu susurro parecía tan necesitado que no había lugar para contestación. Lin, Lin Stark, fue muy bueno pensar en este nombre claramente.era la única persona que podía traerte algo de consuelo ahora.

- ¿Quién es Lin? - Strange preguntó confundido.

- ¿Qué dices? - No, no era posible, no se había metido tanto con el pasado, había hecho que las cosas que sabía sucedieran, todo parecía tan justo ahora que estaba de vuelta, no era posible que sus acciones causaran un cambio tan repentino en la línea del tiempo. El mago parecía estar todavía más enojado con él.

- ¿Qué has estado haciendo de tan mal en el pasado para creer que Lin no existe? - Su cenho era muy fruncido, previendo numerosas complicaciones. - Sabía que era una mala idea dejarte allí, pero la piedra del tiempo no me dejaba traerte de vuelta y decidí esperar a que pasara su ciclo. Todo lo que hiciste puede haber alterado aún más nuestra línea de tiempo y...

- ¡No! Cálmate, todo está bien. Puedes ver que no causé nada muy serio, ya estábamos viviendo en la línea de tiempo que fue cambiada y, si ningun ser celestial cobró el precio en mil ciento y dos años, no creo que se quejen de eso ahora. - Stephen no parecía en absoluto convencido, todavía estaba bastante enojado y seriamente considerado volver al pasado e impedir que Loki actuara allí. - No lo hice a propósito, fue Alanes quien me envió allí y ella fue la que controlaba la joya, su antepasado parecía pensar que era la única manera de poner fin a la guerra de Asgard con los jotuns.

El dios consideró fielmente hacer un poco de sangre brotando de la garganta del protector de la realidad, ya había pasado por muchas cosas en las últimas horas para asustarse tan pronto que podía volver a su tiempo, pero estaba demasiado cansado para hacer cualquier esfuerzo y su magia aún no se había estabilizado lo suficiente como para enfrentarse al aliado.

- ¿Y terminaste la guerra? - El mago cruzó los brazos, no creyó ni una palabra.

- ¡Vives conmigo hace tiempo lo suficiente para saber que soy increíble! - El príncipe se había arrojado de nuevo a la cama y ahora estiraba sus propios músculos. - Llegué, salvé a Thor, salvé a Frigga, gané la confianza de mi abuelo, hice celoso a Odín, tomé la imagen de Borr cuando murió, me llevaron a luchar en la guerra porque Odin también pensaba que yo era increíble, conocí al dios de la guerra y quería golpearlo en la cara, conocí a una de las viejas novias de Odín, salvé a todos con la imagen de Borr , pero entonces Odín dejó morir a su padre sin saber que técnicamente ya estaba muerto. Siempre supe que era un hijo de puta y ahora sólo tengo todavia más razones para creer en eso. Conocí al verdadero heredero al trono de Asgard y a mi madre, que era una mujer maravillosa, al lado del bebé más perfecto del mundo, yo mismo. Evité que los gigantes murieran de hambre y guié a Odín al lugar donde estaba el ataúd de inviernos antiguos, trató de matarme, pero yo con toda mi superioridad sobreviví, le saqué el ojo e incluso usé la imagen del abuelo de nuevo para convencerlo de adoptarme. - Su discurso fue perezoso, como si no le hubiera dado tanta importancia a lo que hizo mientras alardeaba de cada una de sus acciones.

- ¿Cuánta creatividad, has pensado en escribir un libro? - Strange rodó los ojos, dando a su compañero tanta confianza que ni siquiera lo miraba, al contrario, volvería a ajustar su corbata para la ocasión en que iría.

- ¡Ya! Varias veces de hecho. Solía visitar a algunos artistas y escritores de historietas para que escribieran sobre mí, siempre ayudaba a difundir el miedo que tenían mis subordinados y me gusta leer lo que crean.