10- Compañeros de piso

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Después de casi ocho horas de viaje, por fin había llegado a lo que sería mi nuevo hogar los próximos cinco años, un pequeño piso de tres habitaciones y baños independientes, que compartiría con un chico llamado Helmer y su hermana cullo nombre no recordaba.

Me acomodé en lo que sería mi cuarto, después de poner mis cosas todo me parecía más hogareño.

Me tiré en la cama, estaba tan agotado y todavía tenía que llamar al seguro del coche y a una grúa para que lo trajeran hasta la ciudad, de eso me ocuparía más tarde me dije mientras poco a poco caía en los brazos de Morfeo.

Unas horas después unos golpes en la puerta me despertaron.

- Adelante - gruñi soñoliento

La puerta se abrió y apareció Helmer.

- Oh, lo siento. No sabía que estabas dormido. - dijo sonrojado por la vergüenza.

- No es nada Helmer - dije en un bostezo

- Es lógico el viaje fue muy largo, soy un idiota -

- De verdad que no importa - murmure empezando a frustrarme, incluso para mi era imposible enfadarme con Helmer, en las pocas horas que llevábamos conviviendo se había mostrado muy amable y siempre se estaba preocupado de mis necesidades, era un angel.

Habia estado muy preocupado por el tema de compartir piso con unos extraños pero gracias a Helmer no debía preocuparme, su hermana ya era otra cosa ...

- Nora y yo nos preguntamos si te gustaría cenar con nosotros, pedimos pizza y unos refrescos- murmuro con la vista clavada en el suelo

- Claro, bajo ahora - dije más espabilado que hace un momento

Enseguida abandonó la habitación.

Después de unos segundos me levanté de la cama, y fui al baño, me mire al espejo he hice una mueca, estaba totalmente despeinado, y tenía la ropa arrugada, me lavé la cara y me peine con los dedos, seguia teniendo una expresión cansada pero tenía mejor aspecto.

Baje las escaleras para encontrarme con mis compañeros de piso.

- Nora, no empieces a comer, no estamos todos- Le reño Helmer a su hermana

Ella puso los ojos en blanco y dejo la porción de pizza en la caja

- Hola - Salude tímidamente

- Hola - me saludo Nora con una enorme sonrisa

Esta niña me da mal rollo, era como si cada vez que entraran en una habitación no pudiera quitarme la vista de encima, cosa que sorprendia ya que no apartaba los ojos del móvil en todo el día, es más casi me había habituado a escuchar ese " click " " click " todo el rato.

Nora se hizo a un lado, fingí no haberme dado cuenta y me senté al lado de Helmer , no quería ser maleducado pero tampoco quería ver los tristes intentos de una adolescente intentando ligar con un universitario, ya había visto situaciones parecidas en mi instituto y no me apetecía ser el protagonista.

Empezamos a cenar mientras Helmer  hablaba sobre la universidad, también era su primer año, y  el estudiaría empresariales al igual que yo, coincidiariamos en muchas clases por no decir todas.

La conversación se tornaba interesante, cuando sentí una presión en la entrepierna, baje la vista y vi el pie descalzo de Nora, no podía ser verdad, sentí calor en las mejillas y la fulmine con la mirada ¿ Quien se creía que era ?
Me sonreía mientras se llevaba una porción de pizza a la boca.

- Joss ¿ Podrias traerme un vaso de agua, por favor? - preguntó Helmer  con un  tono de voz tenso.

Asentí, me levanté y deje la puerta del salón entreabierta, quería escuchar lo que dirían, nunca había sido un cotilla, pero seguramente hablarían de mi, y quería asegurarme de que Helmer  no pensara nada malo de mi, lo último que quería era ganarme el odio de una persona que tendría que ver a diario, seria demasiado incómodo.

Nota del autor: Holis ¿ Os gusta Helmer? Si no es así seguro que en los próximos capítulos le cogéis cariño, es uno de mis personajes favoritos ❤

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