4.

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Hermione permaneció en silencio, con su rostro pálido durante los últimos 5 minutos. Desviaba su mirada entre Fleur y sus manos. Las palabras de la rubia se repetían en su mente como un disco rayado, todo lo que experimentaba con la chica era nuevo, incluyendo eso: el rechazo.

Cuando finalmente el nudo en su garganta aminoro, llamo la atención de la joven.

-¿Por qué me dices eso? –Pregunto en voz baja.

-Solo digo te he dicho la verdad, apareces aquí para desconcentrarme y molestarme con tu presencia.

-¿Mi presencia te molesta? -Repitió la chica  con un ligero temblor en su voz.

Fleur asintió mientras guardaba su ensayo. La castaña casi sentía las lágrimas en sus ojos ante la indiferencia de la joven. Sin duda alguna, la chica era capaz de hacerla sentir muchas emociones con simples palabras. Algo a lo cual no estaba acostumbrada,  y menos con ese tipo de declaraciones.

Después de varios segundos de asimilar la situación, se puso de pie ganando una mirada desconcertada de su compañera.

- Tengo practica de Quidditch. –Comento, a modo de explicación.- Adiós Fleur.

La rubia frunció el ceño al percibir el tono de voz extraño.  Hermione nunca se despedía, al contrario, siempre le aseguraba que volvería.

-"No debí ser tan bárbara". –Pensó,  al mismo tiempo cerraba sus ojos.

Sin embargo, inmediatamente trato de alejar cualquier rastro de culpa. Durante semanas había buscado la manera de ahuyentar a la chica, y ahora que lo había hecho, no entendía porque eso le provocaba cierto malestar. Tras un suspiro, Fleur se acomodo en su silla y prosiguió con sus tareas.



-¡Diablos 'Mione! –Se quejo Harry al ver como la joven casi se estampa contra él.

-Lo siento, no fue mi intención. –Apresuro a decir la chica, estabilizando  la escoba a su lado.

Después de dos horas,  Harry decidió dar por terminada la practica. Hermione permaneció en su escoba observando como cada miembro se alejaba directo hacia los vestidores. El sudor en su cuerpo era visible a través del uniforme, al igual que su desconcentración que había provocado la molestia de algunos jugadores. Y la prueba más clara era el casi accidente con Harry.

-¿Te sucede algo malo? –Pregunto Ronald observándola. 

-Nada. –Mintió la castaña.. 

-Fue solo el cansancio por la practica. –Justifico el joven de anteojos, enviando una mirada cómplice a la chica.

El pelirrojo asintió antes de unirse a los demás.

-"Eres la persona que más desprecio con todas mis fuerzas" 

 Hermione suspiro tratando de olvidar las palabras de la rubia

-Ten la confianza de decirme lo que te pasa. – Comento Harry con su rostro preocupado pero la joven permaneció con su vista fija en el pasto.- Yo no soy como Ron

La tensión se hizo presente con rapidez entre los dos amigos. Después de unos minutos Hermione finalmente hablo, sus manos apretaron con fuerza la escoba para evitar perder el equilibrio.

-Se que no eres como él. Pero no ocurre nada, Harry.

El chico comprendió que su amiga no estaba cómoda, por lo que decidió no insistir mas en el tema.

-Cuando necesites hablar sabes dónde encontrarme. –Le susurro, antes de dirigirse hacia los vestidores también.


Entre tú y yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora