Jungkook

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Narrador Omnisciente

A pesar de que sus Hyungs le habían dicho que descansara hoy y que se quedara en casa no podía, en unas semanas sería la primer aparición del grupo en unos premios luego de lo del escándalo. Quería que todo estuviera perfecto para ese día, ya que después de que aquello no habían sido nominados en ninguna categoría de ningún premio.

Era la oportunidad de limpiar la imagen de BTS y recuperar la confianza de la gente, daría todo de si mismo. Se lo debía a todos...

La coreografía de ON, su última canción era ciertamente complicada pero la dominaba, aunque la parte del break...sentía que le faltaba. Puso la canción en el reproductor y la programó para que se repitiera de nuevo una vez que terminase. Bailó unas cinco veces la misma canción.

— Yah~ — se quejó con fastidio cuándo observó con detalle la grabación de sí mismo. se seguía equivocando en la misma parte.

Lo intentó de nuevo, una y otra vez. Lo haría hasta que le saliera bien o si cuerpo no aguantase.

— mierda — dijo Jungkook cuando su pierna izquierda se quejó del dolor, cayó al suelo. — mierda, mierda, maldición... — esto no puede justamente ahora. Fue lo que pensó

Chacho, ¿Con esa boca le pides la bendición a tu mamá? — una voz habló en idioma no tan desconocido para él. Cuando la vio caminando hacia el sintió una mezcla de vergüenza y emoción.

Ella lo hacía sentir como un adolecente de nuevo.

— ¿No crees que es suficiente? De tanto pliqui pliqui ya me aprendí la canción naguara — Kimberly ya estaba agachada frente a él con su alborotado cabello negro recogido en una cola alta, a él la fascinaba — ¿Estás bien?

¿Tenía que decir algo no? — bueno, sí.

lo acusó con la mirada — ¿Seguro? — preguntó y el chico asintió seguro

— claro, puedo seguir bailando toda la tarde si así quie... ¡Ay! — le había pinchado la pierna con el dedo haciendo que él mismo se delatase.

Sí, definitivamente su pierna no estaba bien.

aaaa viste? Yo digo que ya está bueno Jungkook, lo haces muy bien — elogió ella haciendo que su inseguridad bajara un mucho por ciento, aún así... — ¿Tienes algo aquí para aliviar el dolor?

— en mi maleta, tengo un spray — la verdad es que sus piernas y espalda estaban llenas de parches que alivian un poco el dolor.

Ella se levantó y se dirigió a donde estaba su bolso deportivo y volvió de nuevo sentándose con las piernas cruzadas frente a él, le lanzó una botella con agua y se puso manos a la obra para aplicar el spray — Nojombre Jungkook, hasta cuando voy a tener que andar haciendo de enfermera contigo, chico. — habló en su lengua natal mientras le aplicaba el spray para el dolor.

A Jungkook se le hacía extremadamente sexy la manera en la que hablaba el español.

Esa mujer lo traía loco desde el primer momento

—por cierto ¿Que haces aquí.? — preguntó Jungkook con curiosidad sin apartar la mirada de lo que ella estaba haciendo. Casi nadie venía a la compañía los fienes de semana al menos que fueran ejecutivos o traineers nuevos. 

— Acompañando a mi papá — respondió — pero me aburrí, vi tu foto en Instagram y bueno. . . — explicó guardando el spray nuevamente en el bolso. — vine a ver quien era el loco a parte de mi papá que trabaja los sábados.

Jungkook rió por la manera en la que lo expresó, su coreano aún era muy básico y cometía mil errores de pronunciación, era algo adorable

— supongo que estoy loco entonces — sonrió por sus palabras.

Naguará! JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora