No estoy bien.

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— Te ves horrible — Fue lo primero que dijo la fea de Sol Hee. — ¿Irás a recibir a tú padre al Aereopuerto con ese aspecto. ? — miró despectivamente de arriba a abajo.

Justo lo que quería oir apenas Dios se levanta. Que me veo horrible.

Y Sí, vieja desgraciada. Voy a ir como se me de la gana.

No estaba de humor.

Y sí, tenía que verme horrible. Anoche no pude dormir otra vez y además de no poder dormir pase toda la noche llorando. Apenas me tire una mano de gato en el pelo y no me puse una sola gota de maquillaje.

Ni si quiera recuerdo haberme echado un baño. De paso, había olvidado que mi papá llegaba de viaje hoy y toda la "família" debía recibirlo además que el hijo mayor de Solhe que estaba pagando servicio vendría de visita.

Wiiii, momento familiar.

Habían pasado ya 5 días desde que había ocurrido el incidente con Huening Kai. Lo ignoraba en las clases lo más que pude denotando mi enojo con el pobre, quien no tenía bla culpa. Pero no me había gustado lo que dijo.

Sus palabras me atormentaron toda la semana y por eso apenas he podido pegar un ojo. No contesté ningun mensaje ni llamada de él tampoco desde ese día.

Era ridículo, pero seguía molesta.

Molesta porque mientras más lo pensaba, más razón le encontraba. Pero no quería obedecer así que solo ignoraba esos pensamientos.

— Ya estoy lista, mamá. — dijo Ha Ru bajando las escaleras, se veía impeclable. Vestido por debajo de las rodillas, zapatos de tacón bajo y un blazer por encima. — Buenos días, Kimberly. — dijo mientras terminaba de recoger su cartera.

— Muy bien, entonces vámonos ya. — dijo la señora esposa de mi papá agarrando las llaves de su carro — Tú hermano nos encontrará directamente en el aeropuerto, así que apresurate — dijo hacía su hija — Tú también Kimberly, subete. — dijo ésta vez hacía mí.

Aunque prefería ir mil veces en un mototaxi, en un ruta o en un burro, no estaba de ánimos como para andar por ahí.

Es más salía porque era mi papá el que estaba recibiendo. Había durado una semana de viaje y la verdad si me hizo un poco de falta el viejo.

Claro, era mejor pasar tiempo con mi pa, que con éste par de mapanares.

Bueno, Ha Ru no tanto. Pero aveces se pasaba de la raya.

Y con todo lo que pasaba, necesitaba un abrazo de alguien cercano. Como mi pai.

Comenzamos el viaje hacía el aeropuerto internacional de Incheon, era un poco lejos de la residencia por lo que serían una hora de viaje. Una hora oyendo a éste par hablar de negocios, ropa y uñas. Mientras yo fingia entender.

Pero ni pio.

Un mensaje de Jungkook apareció en mi pantalla.

« Hey »

«¿Estás libre hoy? En la tarde»

«Tengo un plan genial»

Sonreí al leer su mensaje, era una foto del logo de caso cerrado.

Pues sí, como dije. Decidí ignorar a Kai y seguir viendo a Jungkook, mientras encontraba una solución.

Los últimos días he estado en su casa con bastante frecuencia, hemos visto películas, hecho galletas y hasta hice que se envisiara con series como " La rosa de Guadalupe" "Cartas del corazón" y su favorito "Caso cerrado"

Naguará! JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora