"DILO UNA VEZ MÁS"

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Desperté en aquella habitación blanca algo desorientado sin saber lo que había pasado anoche. Inspeccioné mi alrededor y vi que tenía una mano envuelta en vendas y una pierna dentro de un yeso, y entonces ya recordé todo lo que había sucedido. En ese mismo instante oí la puerta abrirse y vi como una cabellera rubia sujetando un café en la mano asomaba por la esquina de la puerta.

Raoul - Ago, por fin estás despierto (Dijo el chico soltando rápidamente el café dejándolo en la mesa y corrió a abrazar al moreno)

Agoney - Ni que hubiera estado dormido una semana (Reí algo dolorido) Pero, ¿Qué haces tú aquí? ¿Por qué te han avisado a ti?

Raoul - Resulta que cuando tú te fuiste me quedé recogiendo un poco y ensayando algo más la canción, ya que quería tenerla perfecta, y entonces el móvil empezó a sonar y me dijeron que si te conocía, ya que era el contacto más reciente, y al decir que sí me explicaron todo lo que había sucedido y salí corriendo como un loco (Dijo Raoul mientras se sentaba a mi lado en la cama y yo le miraba a los ojos detenidamente, los cuales estaban algo vidriosos) Agoney, pensaba que te había pasado algo muy grave y no podía perdonarme que te hubiera dejado ir a esas horas de la madrugada, pero cuando llegué y el doctor me explicó todo con más detalle y al ver que solo tenías una mano y una pierna rota me sentí más aliviado.

Agoney - Joder rubio, siento mucho que hayas tenido que pasar por todo esto por mi culpa... Tenía que haber tenido de contacto de emergencia a Nerea para que la pudieran avisar en estos casos (Dije incorporándome un poco en la cama)

Raoul - Agoney, no pasa nada en serio... Tarde o temprano me iba a enterar y esta forma ha sido la mejor, porque ahora voy a estar a tu lado cuidándote hasta que te pongas bueno del todo 

Agoney - Jope, es que te tengo que querer, lobito. Ven aquí anda 

El chico se me acercó lentamente  y nos fundimos en un abrazo interrumpido por un pequeño gemido de dolor por mi parte que hizo que riéramos. Después de algunos minutos tocaron a la puerta y los dos nos separamos algo sonrojados al ver al doctor aparecer.

Doctor - Buenos días Agoney, ¿Qué tal va todo?

Agoney - Pues muy bien, doctor... Ya no tengo casi dolor y tengo algo más de movilidad en la mano

Doctor - Perfecto, en la mano solo tienes un esquince, pero la pierna si la tienes rota. Necesitarás rehabilitación un par de meses y como nuevo. Has tenido mucha suerte, podría haber sido peor... Por cierto, ya puedes recoger todas tus cosas e irte a casa, el alta lo tienes en recepción para que lo firmes.

Agoney - Muchas gracias, doctor (Sonreí ilusionado)

El  doctor desapareció por la puerta y Raoul y yo empezamos a recoger mis cosas, vestirme y por fin volver a casa. Me levanté de la cama arrastrando el monitor hacia el baño para cambiarme y ponerme algo de ropa que Raoul había traído de mi casa. Después de vestirme y de que un enfermero me quitara todos los cables que tenía por mi cuerpo, salimos del hospital y subimos al coche de Raoul en dirección a su casa. Se había empeñado en que me quedara en su casa unas semanas hasta que me quitaran todos los vendajes, y yo, que no puedo decirle que no, acepté

El trayecto en coche se hizo algo corto, ya que nos lo pasamos cantando todas las canciones habidas y por haber. Al principio tenía algo de miedo de volver a subirme a un coche por si me volvía a pasar lo mismo, pero Raoul me convenció de que si él conducía todo estaría bien y que ya cuando pudiera otra vez me dejaría conducir a mí para quitarme el poquito miedo que tenía de volver a ponerme delante de un volante. 

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⏰ Última actualización: Jul 01, 2021 ⏰

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